El proyecto que buscaba revertir la prohibición del glifosato no pasó el filtro de la comisión de Ecología y Medio Ambiente. Más allá de la polémica desatada el jueves pasado, la iniciativa original, votada de forma unánime por el Concejo el 16 de noviembre, sigue en pie. Sólo resta saber si la intendente Mónica Fein la promulga o, por el contrario, la veta en los próximos días.

El proyecto del PRO y el oficialismo para tachar la prohibición del agrotóxico no consiguió los cuatro votos necesarios en comisión y por lo tanto no llegará al recinto este jueves.

Sobre siete miembros, las voluntades estaban 3-3, según trascendió. Osvaldo Miatello -presidente de la comisión verde- y Eduardo Toniolli fueron los otros dos que se opusieron. Carola Nin estuvo ausente (se esperaba su voto negativo). Lo que importa en instancias de comisión es que un proyecto cuente con cuatro apoyos mínimos para prosperar. 

A favor estaban Carlos Comi, Agustina Bouza y -si bien no lo manifestó en la previa- Carlos Cossia.

"No hubo error colectivo"

"No consiguieron las cuatro voluntades y no tiene sentido seguir el tema cuando las posiciones están claras", confirmó Miatello y recordó que "venimos de una situación muy extraña".

Fue Giuliano quien terminó de enterrar este miércoles las posibilidades del proyecto que buscaba revertir la prohibición del glifosato, y convertirlo en un protocolo.

El edil peronista sostuvo que “algunos concejales manifestaron votaron apurados, pero no hubo error colectivo. En el caso de Rosario, la aplicación de herbicidas como glifosato no se puede hacer en zonas densamente pobladas”, argumentó Giuliano.

“Es una ciudad estrictamente urbana con una franja agronómica muy pequeña”, señaló y consideró que, por ejemplo, “entre Rosario y Pérez hay una continuidad urbana y hay que ser razonables”. Es decir, “no tenemos 500 o 3 mil metros de distancia como dice la legislación provincial para poder fumigar”.

El debate se dio, además, en medio de una presencia activa de organizaciones ambientalistas.

Como el nuevo proyecto no superó la estratégica comisión de Ecología, queda en manos de la intendente Mónica Fein decidir si promulga la ordenanza o la veta, y en el segundo caso, el debate volvería al Concejo, ya con su nueva conformación.