Con 12 mil casos confirmados en lo que va del 2024, Rosario atraviesa la peor epidemia de dengue que se recuerde. "Cada brote supera al anterior en cantidad de casos", afirmó el infectólogo Matías Lahitte, quien junto al director de Políticas Intersectoriales, Ignacio Mangiamelli ofreció este mediodía una conferencia de prensa en el Cemar.

"El brote va a seguir en lo que queda de marzo y abril. Pero dependerá, además, del clima", señaló el especialista, quien confirmó además que hay enfermos internados en hospitales públicos y también privados, tanto adultos como niños. Por el momento ninguno reviste gravedad.

El distrito noroeste y oeste en general son las zonas más afectadas aunque hay casos en toda la ciudad.

Las estimaciones llevan a pensar que a lo largo de este año el dengue será endémico en Santa Fe, lo que implica que habrá circulación viral durante los 12 meses y no ya en temporadas. Chaco, Misiones, Formosa, Corrientes, Salta, son algunas de las provincias que ya transitan esta situación.

"La manera de encarar este problema es en equipo, de manera interdisciplinaria. Buscamos que no haya hospitalizaciones ni fallecidos", remarcó Lahitte. Para eso se dispuso un control estricto con seguimiento de "llamadores" de los enfermos que además tienen patologías previas, señalaron los funcionarios en la conferencia.

Si bien el número de casos es alto y se estima que son muchos más teniendo en cuenta que hay gente con síntomas leves que no consulta y muchos asintomáticos, la cantidad de internados pediátricos y adultos no es elevada.

Fallecidos hubo tres en la ciudad en esta temporada. Dos rosarinos y una persona oriunda de Paraguay que llegó a la ciudad con síntomas y murió en Rosario.

"No se queden en la casa personas que tienen dolor abdominal intenso, algún sangrado o signos de deshidratación. Es importante que no se automediquen y consulten con el equipo de salud. La llegada temprana es fundamental para evitar complicaciones", aseguró el médico.

Los síntomas de dengue son dolor en las articulaciones, dolor de cabeza, detrás de los ojos, malestar general, vómitos, náuseas y pueden aparecer manchas en distintos lugares del cuerpo.

Es importante no automedicarse y acudir o llamar al médico de confianza, ya sea en salud pública como en el ámbito privado.

Es fundamental descacharrar los domicilios, en todos los barrios de la ciudad, colocarse repelente y poner mosquiteros.

A nivel municipal se está fumigando y se están realizando visitas domiciliarias para acompañar a los vecinos en el proceso del descacharrado, detectar personas febriles y llevar información, dijeron los funcionarios.