Los prestadores de servicios de transportes para personas con discapacidad llevaron adelante este miércoles una jornada de protesta nacional. La medida busca “visualizar el estado terminal” en que se encuentra el sector.En Rosario se realizó una concentración en el parque Independencia, en el cruce de Oroño y Cochabamba.

La titular de la Asociación Provincial de Instituciones para Personas con Discapacidad, Mariel Chapero, resumió el motivo de la protesta: “Lamentablemente, estamos concentrando porque la situación del sistema integral de prestaciones para personas con discapacidad, que estaba en riesgo y en situación de desfinanciación desde hace años, es terminal”.

Además, agregó que de todos los desfasajes que se registraron producto de la inflación del año pasado y la falta de actualización de los aranceles de prestaciones, en diciembre se sucedieron los distintos aumentos de combustibles, y por eso los prestadores se vieron imposibilitados de seguir brindando el servicio de transporte”.

Agregó que “el 30 de enero, y a pedido de las organizaciones, e insistiendo en que el Estado nacional brinde un aumento que pudiera recomponer esta situación para que los servicios sigan funcionando, se otorgó un aumento ínfimo y que no permite volver a funcionar el sistema".

"Hoy por hoy, el retroceso en materia de derechos es muy concreto. Las personas con discapacidades no pueden acceder a sus prestaciones. Los transportistas no pudieron trabajar durante enero”, añadió.

Chapero sostuvo “los transportistas se están fundiendo, y las instituciones van en ese camino. El aumento que se dio fue de un 20 por ciento para enero y un 10 para febrero. El desfasaje que tenemos, sin tener en cuenta que cobramos cada 60 a 90 días, es de 100 puntos en el último año solamente”.

“Nosotros nos venimos movilizando desde el gobierno de Mauricio Macri, y ya en esa época había una diferencia muy importante con relación al proceso inflacionario. Después atravesamos la pandemia de coronavirus. Luego ingresamos a una crisis económica con una inflación muy alta, y un sistema de salud que cobra a los 60 o 90 días. Eso hace que esos 100 puntos de desfasaje que tenemos con relación a la inflación del último año se conviertan en 150. Es imposible sostener servicios en esas condiciones”, subrayó.

Chapero aseguró que “hay un quiebre concreto y efectivizado en materia de derechos, que ya fueron vulnerados. Ya hubo un retroceso. Le pedimos al gobierno que le dé continuidad a los programas, pero financiándolos. Lo mismo sucede en la provincia. Estamos esperando desde el 2 de enero reunirnos con el gobernador porque Iapos paga menos que el gobierno nacional. Y también es una situación muy compleja porque los afiliados no consiguen prestadores. No se puede trabajar con esos aranceles”.