El conductor televisivo Alejandro Wiebe, más conocido como Marley, será investigado por la Justicia Federal en la causa por presunto abuso sexual infantil. El conductor de Telefe fue acusado por un joven de identidad reservada, en Misiones y realizó una presentación ante la Unidad Regional II de Oberá. Sergio Ramírez, el abogado del denunciante, confirmó que la causa será anexada a la investigación llevada a cabo contra el productor televisivo Marcelo Corazza, ahora detenido.

La denuncia llegó a Comodoro Py desde Oberá y estará a cargo del juez Ariel Lijo, dado que ambas celebridades están involucradas en la demanda presentada, sostuvieron fuentes allegadas al caso. Ramírez comentó que el denunciante "está conmovido y angustiado por lo que le tocó vivir en todo este tiempo".

"Quiero manifestar que en un viaje que he realizado a la provincia de Buenos Aires, más precisamente a la localidad de Pilar, en una casa quinta, no recuerdo ni puedo precisar la fecha exacta, pero fue hace muchos años atrás, vi y reconocí a los conductores famosos: MARLEY y MARCELO CORAZA, al primero lo llamaban 'el porteño' y al otro: 'el bonito'", dijo la persona que solicitó expresamente la preservación de su identidad el pasado 2 de junio.

El 31 de mayo, el productor televisivo Marcelo Corazza se entregó a la Justicia luego de que la Cámara del Crimen revocara su libertad condicional y ordenara su detención. Los delitos de los que se lo acusa son: asociación ilícita con fines de trata de menores para la explotación sexual en el marco de la causa por abusos sexuales perpetrados en 1999.

Los magistrados acusaron de trata de personas agravado por la cantidad de víctimas, perpetrada en contra de menores de 18 años y aprovechándose de su situación de vulnerabilidad, todos ellos en concurso real. Tras esta decisión, Corazza se entregó a la Justicia, en la Dirección de Trata de Personas de la Ciudad de Buenos Aires.

En el mismo fallo, el Tribunal confirmó la detención de Raúl Mermet, Andrés Fernando Charpenet y de Francisco Rolando Angelotti. Para los jueces de la Sala V de la Cámara todos cometieron el delito de trata de personas agravado por la cantidad de víctimas, perpetrada en contra de menores de 18 años y aprovechándose de su situación de vulnerabilidad, todos ellos en concurso real.