Amsafé Rosario junto a otras departamentales solicitaron la reapertura de paritarias para adelantar el tramo del 10% de mayo a abril, a raíz del arrollador avance de la inflación producto de la corrida cambiaria de los últimos días. Aseguran que de esta manera no hay forma de llegar a finales de junio, tal como fue acordado en la última mesa salarial.

"Anticipamos que el porcentaje se quedaba corto y la inflación nos iba a ganar", señaló el secretario general, Juan Pablo Casiello, respecto al último acuerdo paritario del 40% dividido en tres tramos: 22% en marzo, 10% mayo y 8% en junio, con cláusula de revisión incluida en mayo.

"Ocurrió lo que anticipábamos, pero fue peor porque cuando firmamos la paritaria en marzo avisamos que el porcentaje quedaba corto y la inflación nos iba a ganar. Lo que vemos, en definitiva, es lo que le ocurre a todos los trabajadores: una pérdida muy grande del poder adquisitivo a raíz de la disparada del dólar y la inflación", resumió a fin de poner sobre la mesa la realidad empírica que atraviesa la clase trabajadora ante el avance del aumento de precios a la hora de poder tener una vida digna.

Respecto al pedido, Casiello recordó que "el acuerdo prevé un tramo de 10% en mayo, que se cobraría en junio y ahí llegaríamos al 32%", y explicó que ese porcentaje "se adelantaría a abril producto de la inflación acumulada que mide el Indec". Por eso solicitó que ese porcentaje se adelante a abril para cobrarlo en los haberes de mayo.

"Por eso le pedimos a la conducción provincial del gremio (Amsafé) que eleve el pedido al Ministerio de Educación para reabrir la paritaria porque esperar al 31 de junio con estos valores nos resulta una barbaridad", insistió para explicar que, más allá de la cláusula de revisión pactada en caso de que la inflación supere el porcentaje de aumento acumulado respecto al escalón de mayo, "esa actualización se cobraría en junio, con lo cual ya estaríamos por demás de atrasados respecto a la inflación estimada".

Además, mencionó que uno de los temas que necesitan tratamiento urgente es el de las asignaciones familiares. Según precisó, "están congeladas en $780 por hijo y es prácticamente nula en comparación con el costo de los alimentos".