Referentes de las entidades que integran la Mesa de Enlace criticaron al gobierno nacional tras el lanzamiento de la segunda edición del programa de dólar soja. Y señalaron que “no es el camino a seguir” y que se trata de “un parche”.

En la Federación Agraria Argentina (FAA) apuntaron: “Reiteramos que ese no es el camino a seguir y que continuar multiplicando los tipos de cambio atenta contra el sector y la economía en general”.

La entidad, a través de un comunicado, agregó: “Esas políticas son parches que implican algún beneficio a unos pocos y complican a la mayoría”.

Carlos Achetoni, presidente de la FAA, evaluó que la versión anterior del dólar soja “impactó muy fuerte y negativamente sobre el precio de los arriendos, de los insumos de las economías regionales, como también en los insumos de la actividad avícola, la ganadería vacuna y porcina y la lechería”. Y añadió: “No sólo los productores no nos beneficiamos con nada sino que, directamente, nos perjudicamos”.

Achetoni, además, enfatizó que “es necesario que la Argentina pueda contar con una política agropecuaria integral, que atienda las necesidades de todos los productores, que contenga a las economías regionales y que contemple la dramática situación como consecuencia de la sequía, heladas y otras inclemencias climáticas”. Al respecto, subrayó que “esa es la agenda real y urgente de los productores”.

“El dólar soja es beneficio para algunos y perjuicios para otros, ya se lo explicamos al gobierno”, agregó, paralelamente, el titular de Coninagro, Elbio Laucirica.

En tanto, el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino, consideró: “El gobierno sigue tomando medidas para beneficio propio y no van en línea con lo que queremos los productores, que es un tipo de cambio único y recibir el precio internacional del producto”.

Pino, además, subrayó que “a juzgar con lo que ocurrió en septiembre pasado con las operaciones en la cadena comercial entre canjes de insumos, alquileres de campos y precios en los mercados, nos preocupa porque siempre aparecen los vivos”.

Por su parte, la presidenta del PRO a nivel nacional, Patricia Bullrich, repudió el lanzamiento de la nueva edición del dólar soja y lo calificó como una “medida de desesperación”.

“Lo último que necesita la actividad agropecuaria son cambios en las reglas de juego cada dos o tres meses”, aseveró en un comunicado.

“Las medidas anunciadas por (el jefe del Palacio de Hacienda) Sergio Massa no traen ninguna solución de fondo a la economía en general ni para la producción. Desde que por única vez se implementara el dólar soja anterior, la inflación no bajó y el dólar pasó de 295 a 316 pesos”, dijo Bullrich.

En esa línea, agregó: “No sabemos cómo va a funcionar este nuevo esquema cambiario. Habrá que analizar la letra chica de los anuncios para saber si, realmente, les va a llegar a los productores”.

La nueva edición del dólar soja ofrecerá, a partir de mañana y hasta el 31 de diciembre, 230 pesos por cada divisa obtenida de la exportación de la oleaginosa.

La Casa Rosada espera superar el récord histórico de exportaciones del complejo agroindustrial y cumplir con las metas de reservas y fiscal acordadas con el Fondo Monetario (FMI).

Además, creará un fondo de apoyo a las economías regionales, uno para mantener el valor de las asignaciones familiares y otro de subsidios a las cadenas de valor avícola, bovina, lechera y porcina para aumentar producción.

“Esas medidas de desesperación y corto plazo traen ventajas para unos pocos y son menos que un parche para una macroeconomía que sigue fuera de control. Los argentinos siguen esperando que el gobierno estabilice la economía y no que siga estirando una agonía que está destruyendo la economía y el salario”, agregó Bullrich.

Del anuncio de la nueva edición del dólar soja participaron los exportadores de aceites y granos agrupados en la Ciara-CEC.

Sin embargo, la Mesa de Enlace criticó la medida y reclamó un tipo de cambio único que les permita acceder a los precios internacionales a todos los productores, no solo a los sojeros.

En tanto, el diputado nacional del Frente de Todos (FdT) Marcelo Casaretto destacó que la reapertura del Programa de Incremento Exportador (PIE), también conocido como dólar soja”, permitirá fortalecer las reservas llevándolas a un rango de “alrededor de 13.000 millones a 15.000 millones de dólares”

De ese modo, razonó el legislador, se alejará “la posibilidad de una devaluación general”.