De la mano de una ola vandálica que castiga a la ciudad, principalmente ligada al robo de bronce, pero que también se expresó en el intento de prender fuego el cartel de Rosario en el parque de las Colectividades, el municipio encaró una campaña de refacción de esculturas y ornamentos de plazas y parques que sufrieron roturas y deterioro. Se trata de la puesta en valor de unos 20 monumentos públicos que forman parte del patrimonio artístico, histórico y cultural rosarino.

Las piezas fueron renovadas trabajando sobre partes faltantes o deterioradas, con tareas de pátina y pintura y protección poliuretánica, entre otras acciones realizadas por la Secretaría de Obras Públicas. Las intervenciones integrales de restauración y reacondicionamiento fueron practicadas en diversas fuentes, estatuas y bustos históricos, con la idea de conservar el patrimonio, luego de registrarse una seguidilla de ataques de vandalismo urbano, roturas, escrituras y robos de piezas en distintos espacios públicos de la ciudad.

Por ejemplo, en octubre de 2021 se robaron a Boggie, el Aceitoso y Mendieta de la estatua del Negro Fontanarrosa ubicada en la plaza Montenegro. Los autores del hecho arrancaron las pequeñas figuras que estaban colocadas sobre la mesa en la que a su vez está “acodada” la figura del dibujante y humorista. El robo de esos objetos se sumó a una larga lista de actos de vandalismo que pasan, principalmente, por la sustracción de placas y otros objetos metálicos.

Es por esto que, desde hace varios años, en algunos espacios públicos se exhiben réplicas exactas de las piezas originales, que no cuentan con un valor económico, sino fundamentalmente simbólico y cultural. “Las esculturas y bustos originales forman parte del patrimonio histórico de la ciudad. Son piezas centenarias elaboradas por artistas de renombre, que eran constantemente vandalizadas debido al costo elevado del material de origen, ya sea bronce o mármol”, destacaron desde Obras Públicas.

Las tareas de restauración, reparación y puesta en valor son llevadas adelante por la Dirección de Restauraciones de la Secretaría. A partir de un convenio de la Municipalidad con la Facultad de Bellas Artes de la UNR, se contrató a especialistas para trabajos puntuales.

Las intervenciones realizadas incluyeron la limpieza, saneamiento, restauración y puesta en valor de esculturas, monumentos, bustos y placas vandalizadas o dañadas por el paso del tiempo. Los trabajos contemplaron tareas de adhesión del material desprendido, reconstrucción con cemento o resina de las partes perdidas o averiadas, ejecución de pátina blanca símil mármol o pátina símil bronce con pintura acrílica, y protección poliuretánica.

Los monumentos públicos restaurados fueron la fuente del Hospital de Niños, ubicada en avenida Pellegrini y Ovidio Lagos; la fuente de Caballos y Leones, ubicada en el parque Independencia; y la de las Utopías, emplazada en la bajada Sargento Cabral y Urquiza. En estos casos, se realizó una intervención integral que incluyó trabajos como limpieza general con hidrolavado, restauración de los ornamentos centrales, reconstitución de las figuras superiores, reparación y cambios de las cañerías de los picos de agua, renovación de las bombas, pintura general y reparación de la parte eléctrica.

En tanto, en el marco de los III Juegos Suramericanos de la Juventud, se realizaron diversos trabajos de reacondicionamiento del predio del parque Independencia, entre los cuales se encuentran la restauración de diez bustos y esculturas distribuidos en diferentes sectores. Las esculturas restauradas fueron Flora La Primavera, Tierra Virgen, Venus de Milo, y dos esculturas de figuras femeninas que forman parte de la fuente del parque Francés. En estos casos, se realizaron trabajos de restauración con cemento y pintura.

Por otro lado, también en el parque Independencia, se pusieron en valor los bustos de Artigas (obra de Edmundo Prati), Benito Pérez Galdós y José Hernández (ambas obras de Erminio Blotta), Juana Blanco (obra de Alberto Palau) y Martín de Güemes. Las intervenciones concluyeron con pátinas símil bronce o símil mármol con pintura acrílica.

Asimismo, con respecto a trabajos realizados en otros sectores de la ciudad, se pusieron en valor los bustos de Fray Vittoria, que está en la plaza Guernica, elaborada originalmente por Erminio Blotta; Moisés Lebenson, hecha por Carlota Leone, ubicada en bulevar Avellaneda y avenida Alberdi; y José Manuel Estrada, una obra de Luis Perlotti, emplazada en avenida Pellegrini y bulevar Oroño (plaza del Foro).

También se desarrollaron restauraciones de diversas esculturas, como la escultura Boxeador, elaborada por el artista Reinaldo Baduna y emplazada actualmente en el pParque Urquiza; Diana La Cazadora, ubicada en bajada Sargento Cabral y Urquiza; y tres esculturas de figuras femeninas ubicadas en las piletas del Saladillo, en el parque del Mercado.

Cabe destacar que estas esculturas femeninas pertenecían a una casona de zona sur fundada a mediados del siglo XX. Posteriormente, la casa debió ser demolida a causa de la obra de ejecución de avenida Circunvalación, y se trasladaron temporalmente al Museo de la Ciudad para su conservación. Tras un pedido de vecinos para que volvieran al barrio, las esculturas fueron colocadas en las piletas del Saladillo.