Daira Castagno no puede esperar y eso es lo que su familia reclamó en el Sanatorio Saladillo, sede de la obra social del Sindicato de la Carne. La nena de 7 años fue operada en abril pasado de un tumor que le obstaculizaba el intestino y ahora debe someterse a un tratamiento oncológico, sin embargo, un cambio "inconsulto", según señalan sus padres, de la obra socia de la UOM, obra social a través de la cual fue intervenida, a la del Sindicato de la Carne hizo que la chiquita fuera dada de baja en la primera de las entidades y que la segunda afirme que recién le darán "el alta en un mes" para que pueda realizarse los estudios e iniciar el tratamiento. Con desesperación, su mamá, Damaris Kleiban, afirma que no dar una respuesta "es abandono de persona".

El relato de la mujer se inicia exactamente el 18 de abril, cuando "a Daira la tuvieron que operar de urgencia", una intervención que por entonces se llevó adelante a través de la UOM la obra social que su esposo tiene a través de su trabajo en el frigorífico Swift y la que, según cuenta la mujer, "solicitó explícitamente seguir teniendo porque allí está el médico de cabecera de la nena".

"Después de la cirugía se hizo una biopsia y el jueves pasado se comunicaron desde el Servicio de Oncología Pediátrica del Hospital Italiano donde la habían operado para comunicarnos el resultado y decirnos que ese mismo lunes Daira tenía que internarse para hacer los estudios necesarios para que iniciara el tratamiento oncológico", relató Damaris.

La sorpresa fue al momento de autorizar la internación, cuando en la obra social de la UOM les dijeron que la niña había sido dada de baja y que ahora todo el grupo familiar recibiría prestaciones a través del Sanatorio Saladillo, que es la sede de la Obra Social del Sindicato de la Carne, en Arijón 145.

"Ahí fuimos, entregamos todos los papeles ese mismo día, pero desde entonces nos dicen que el alta va a demorar un mes porque los papeles se hacen en Buenos Aires, continuó la mamá. Incluso, nos ofrecimos a pagar la internación para poder al menos iniciar los estudios para poder saber con mayor certeza cuál es la urgencia de mi hija, pero se negaron todo el tiempo".

Con esa urgencia y toda la angustia de saber que la nena, que es alumna de 2º grado del Normal Nº3, necesita un tratamiento más allá de haberse avanzado en la intervención quirúrgica, la familia se movilizó este jueves a la sede la obra social de la zona sur.

"Ellos nos dicen que tenemos que esperar un mes, pero mi hija no tiene un mes para esperar y así nos lo dijo la médica oncóloga Marita García que la atendió en el Italiano y que es quien la viene siguiendo", explicó la mujer con desesperación y agotadas todas las instancias administrativas y de diálogo con la obra social.

"Mi hija lo que necesita es quimioterapia y no puede esperar", agregó.

Para la familia, que está integrada por un hermano mayor de Daira, "cada día que pasa es una eternidad" y si bien por estas horas encontraron la posibilidad de avanzar con ciertos estudios en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela, saben que allí "la prioridad es de quienes no tienen obra social y eso está bien, pero al menos vamos a poder realizarle una tomografía con contraste".