Las autoridades sanitarias de municipio y provincia atribuyeron el incremento de casos en Rosario y la provincia a las reuniones familiares por el Día del Padre y los festejos de los hinchas de Colón en la capital provincial por la obtención del campeonato. Advirtieron que las aperturas y cierres de actividades de manera intermitente asoma como una constante a la hora de evitar la saturación del sistema sanitario.

Los 676 casos registrados en las últimas 24 horas en Rosario y los 1.954 en el territorio provincial hablan de una meseta que sigue siendo alta.

Los festejos por el campeonato de Colón (durante el 4 de junio y días posteriores) y la falta de cuidados en la reuniones sociales que se celebraron por el Día del Padre dispararon la suba de contagios, sostienen desde provincia y municipio. Situación a la que debe sumarse la ocupación de camas producto de la gravedad de los cuadros de coronavirus por las mutaciones del virus en esta segunda ola.

Por ejemplo, mientras este martes hubo 676 casos, el martes 22 de junio habían sido informados 402, el martes 15 de junio fueron 808 positivos y una semana antes hubo 729 contagios nuevos en Rosario.

"Tuvimos 700 casos, ese leve aumento se da a 10 días del Día del Padre", explicó el secretario de Salud Pública municipal, Leonardo Caruana, para evaluar que la ciudad se encuentra "en una meseta alta, pero los casos están bajando al igual que la ocupación de camas".

En esa sintonía, la ministra de Salud provincial, Sonia Martorano, apuntó que "uno de los lugares más complicados" respecto a la suba de contagios "es en la ciudad de Santa Fe y es por los festejos futbolísticos durante tres días (el campeonato obtenido por Colón)".

Caruana admitió que en esta segunda ola de la pandemia de coronavirus "las variantes son un fenómeno que se viene dando", puesto que "la mutación es una posibilidad de existir" para el virus. De todas formas, destacó que este escenario encuentra a Rosario y a la provincia con un mayor porcentaje de la población vacunada camino a la inmunidad de rebaño.

Por su parte, Martorano deslizó: "Lo que pareciera es que el virus va a quedar circulando por eso lo que apuntamos es tener esquemas completos de vacunación en toda la población. No podemos decir que la extinguimos o le ganamos".

En tal sentido, recordó que "Australia, que fue un ejemplo, tuvo que volver a las restricciones como también lo hizo Israel" con un alto porcentaje de la población vacunada.

A la hora de evaluar los pasos a seguir ante un eventual colapso sanitario, la titular de la cartera sanitaria apuntó: "Vamos a tener aperturas y cierres intermitentes, que fueron lapsos cortos y la gente los respetó aunque nos hubiera gustado que sean 14 días conforme al ciclo viral". Y concluyó: "Los lugares con protocolo no son el inconveniente, tiene que ver con el nivel de circulación y los accidentes, que son los que ocupan muchas camas".