La decisión del gobierno provincial de mantener los cines y salas de teatro cerradas durante esta semana cayó como un baldazo de agua helada entre los empresarios del sector. Peor aún. En el caso del complejo Nuevo Monumental, su director de contenidos, Adrián Ortiz, adelantó que "si no nos permiten abrir con el estreno de la película Rápido y Furioso este jueves 24, o al menos no nos habilitan para trabajar en las vacaciones de invierno, a más tardar a fines de agosto nos vamos de Rosario".

De concretarse esta amenaza, sería otro duro golpe al corazón de la ciudad. "Leo en el diario varias notas que hablan de levantar el centro rosarino, de rescatarlo, pero ya se fue Falabella y si no nos ayudan nos vamos también nosotros. Si se va Mc Donald's, no quedará nada más en el centro", destacó el empresario.

Este miércoles, el ministro de Cultura de la provincia, Jorge Llonch, anticipó que cines y teatros permanecerán cerrados durante toda la semana, lo que incluye el próximo sábado y domingo. "No se habilitarán las salas de teatro ni de cine antes de que se habiliten las escuelas", aseguró el funcionario.

Los ecos no tardaron en llegar. "Estamos totalmente asombrados, entristecidos y decepcionados. Este viernes abren los cines en 14 provincias de todo el país y el jueves que viene habilitarán funciones en los cines en 19 de los 24 distritos. La segunda provincia más importante, Santa Fe, no habilitó los cines, y la verdad es que no entendemos más nada", dijo Ortiz.

El actual grupo inversor que administra el Nuevo Monumental salió al rescate de la tradicional sala cuando su continuidad estaba seriamente amenazada hace más de dos años. Con una fuerte apuesta en equipamiento de alta tecnología, y el reacondicionamiento de butacas y gradas, volvió a ser una opción para los rosarinos y un mojón en el centro rosarino.

La tradicional sala de San Martín y San Luis tenía destino de demolición o de convertirse en un templo religioso como ocurrió con otros cines que engalanaron Rosario. El Nuevo Monumental es hoy una sala reconstruida casi desde cero, con el confort y la tecnología disponible en cualquier cadena internacional. Y sus creadores propusieron una alternativa superadora: hacer del complejo un espacio de "artes combinadas", donde se puedan realizar convenciones, obras de teatro y stand up en forma simultánea a la exhibición cinematográfica.

La pandemia afectó a todos los rubros y actividades, pero en el caso de las salas del séptimo arte, vienen sufriendo el cierre casi en forma ininterrumpida desde marzo del 2020.

"Estamos avisando que vamos a cerrar definitivamente", dijo Ortíz. Una de las necesidades de los empresarios es poder trabajar con el estreno de la nueva película de Rápido y Furioso, previsto para el jueves que viene, o más tardar para el comienzo de las vacaciones de invierno (que si no se modifica el calendario inicial comenzarían el 12 de julio y finalizarían el 24). Además, buscan una respuesta concreta al pedido de ayuda que hicieron oportunamente.

"Si nada de esto se cumple, nos tendremos que ir a más tardar a fines de agosto o durante ese mes. Hemos hecho trabajos impresionantes en lo edilicio, en las gradas, en equipos que salieron miles de dólares, butacas nuevas. Pero no tenemos más recursos. Después de 14 meses estamos cerrados y castigados, en un marco donde la mayoría de las actividades abrió. Lo de los estrenos sería una mini inyección de dinero, pero necesitamos un aporte económico del Estado. ¿Por qué 14 meses cerrados y el resto pudo abrir? No estamos especulando. Nos vamos a ir.Agosto es la fecha límite. Lo venimos diciendo, pero pareciera que el propagador del virus es el cine y nos tienen castigados, cuando no hubo un solo contagio en el planeta Tierra. Quizás deben querer que el cine se vaya", indicó Ortíz y reveló que la deuda generada en Rosario por la inactividad es muy pesada e importante.

En cuanto a las gestiones previas a esta situación crítica, el empresario reveló que han mantenido conversaciones con la provincia en varias oportunidades. La más reciente a través del secretario de Comercio Interior, Juan Marcos Aviano, "quien se hizo presente en el cine, donde nos mencionó una quita importante en impuestos y servicios y una suma similar a la del sector gastronómico, pero es una ayuda muy pequeña y la sabremos en concreto en los próximos 15 días para ver si es real".

En relación a las autoridades municipales, destacó que "nos reunimos con un montón de funcionarios de todas las áreas y escuchamos todas promesas. Lo más probable es la condonación de la TGI (Tasa General de Inmuebles). Del resto ni una sola ayuda. Nos dicen que no tienen nada que hacer. Le llevamos carpetas con una proyecto de contraprestación cultural y nos insisten que no podemos hacer nada".

El empresario advirtió que si se cierran definitivamente peligran 20 puestos de trabajo en forma directa e indirecta.