El ministro de Trabajo de Santa Fe, Juan Pusineri, afirmó que sin bien los protocolos de seguridad sanitaria se están aplicando en la mayoría de los locales gastronómicos, habrá que “ajustar” detalles que tienen que ver con el distanciamiento entre mesas en los lugares abiertos, “donde hubo imágenes de amontonamientos”.

El funcionario provincial señaló que sobre el sector de la gastronomía “se llevaron a cabo operativos de control de protocolos en Rosario y Santa Fe. La intención es hacerlo de manera continuada. En términos generales hubo un cumplimiento de las medidas de prevención. Pero sí notamos un distanciamiento que no era el adecuado y la falta del veedor para el cumplimiento de las normas sanitarias que cada establecimiento debe tener. Y en ese sentido, hubo algunas clausuras por parte del municipio con incumplimientos más importantes”.

Desde que se implementan controles durante la pandemia, el municipio de Rosario clausura entre tres y cuatro bares por fin de semana. Los cierres se disponen por no respetar los protocolos o abrir fuera de horario permitido. La mayoría en infracción minimarkets.

En ese sentido, el ministro de Trabajo de la provincia admitió que “se revisarán con los municipios de Rosario y Santa Fe los controles sobre el distanciamiento de las mesas en los lugares gastronómicos. La imagen que queda es de gente amontonada y no es una buena imagen en estos tiempos. Esto se da en el exterior de los locales, en el interior se respeta la distancia de 1,50 metro entre mesa y mesa”, explicó Pusineri.