El consumo masivo en la provincia de Santa Fe vivió un "verano gasolero", según el informe del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso): muchos de los grandes rubros aún no se reactivan. 

En el caso de los supermercados, las ventas reales siguen perdiendo contra la inflación y en diciembre la baja fue del 18% interanual en la provincia de Santa Fe. “Indumentaria, calzado y textiles para el hogar” fue el rubro más afectado, seguido por “Almacén”: en conjunto representan el 41% de las ventas totales.

Las ventas en supermercados crecen menos que los precios y esta tendencia persiste de manera ininterrumpida hace un año y medio, según el centro de estudios. 

Las ventas en Santa Fe medidas a precios corrientes para el mes de enero de 2020 sumaron un total de $4.022 millones, lo que representa un aumento de 42,6% respecto al mismo mes del año anterior. Durante el mismo período, la inflación acumulada en los supermercados para la provincia de Santa Fe ha alcanzado el 74% en base a la inflación supermercado. 

Asimismo, enero trajo continuidad en la caída en las ventas de autos 0KM ya que se vendieron 4.133 unidades, 20% menos que el mismo mes del año anterior. 

Sin embargo, la caída interanual se desacelera ya que tuvo su mínimo en mayo de 2019 (-51,2%) y en enero se encuentra en -20%, según datos de Accara. Los patentamientos más que duplicaron lo producido en diciembre del 2019, que fueron 1.897 vehículos.

La construcción es otro de los grandes rubros que no se reactiva. En enero la caída interanual en ventas de cemento en Santa Fe fue del 15,6%, impulsada principalmente por la caída de la venta de cemento a granel (-21%). Esta se relaciona con las obras de gran escala (en su mayoría obra pública).

A su vez, el consumo residencial de energía eléctrica se recupera de la mano del congelamiento de tarifas pero el industrial sigue en caída. Mientras que el residencial aumentó un 3,4%, el de los Grandes Usuarios cayó un 4,8% con respecto a enero de 2019.

Los préstamos siguen siendo inferiores al año pasado: En enero hubo una caída interanual en todos los montos de financiamiento en términos reales. El más afectado fue el de los créditos prendarios (-36%), seguido por los créditos personales (-30%) y en tercer lugar las tarjetas de crédito (-14%).

El único contraindicador, según el Ceso, es el índice de confianza que mejora mes a mes. Al comparar el indicador de confianza del consumidor se observa un crecimiento del 13,8% en comparación con un año atrás, aunque sigue estando debajo de los niveles promedio del período 2015-2017.