Al igual que los docentes de escuelas públicas, los maestros de colegios privados acordaron posponer el comienzo del ciclo lectivo para el 11 de marzo. Con una participación de 200 delegados, el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop) irá a una huelga los días 6 y 7 marzo y adherirá al paro nacional de mujeres previsto para el viernes 8. "Estamos esperando un porcentaje de aumento de arranque. La cláusula gatillo con tope no es una política salarial sino una herramienta para no perder poder adquisitivo", dijo el titular del gremio, Martín Lucero.

Después de los encuentros paritarios en los que se escuchó la oferta hecha por el gobierno santafesino de recomponer los salarios docentes de acuerdo a los ingresos del Estado y tras seguir la inflación mes a mes, Sadop replicó la postura adoptada por el gremio de los maestros públicos (Amsafé).

Así, habrá una huelga de 48 horas el próximo miércoles y jueves y luego se adherirá al Día Internacional de la Mujer con un paro, para empezar las clases recién el lunes 11 de marzo. Cabe aclarar que en la decisión de Sadop, también se dejó votada otra medida de fuerza por 48 horas para la segunda semana del calendario escolar.

"Técnicamente no hay oferta salarial. Es la continuidad del año pasado, con una variación perjudicial como la cláusula gatillo con un tope de acuerdo a la evolución de los ingresos de la provincia. Nos invitan a ser socios en las pérdidas", sentenció Lucero.

De esta forma, Sadop espera que para la semana entrante el gobierno santafesino convoque nuevamente a paritarias, "pero para escuchar un porcentaje de arranque y no una propuesta de ajustar el sueldo en 12 cuotas de una manera imprevisible y sujetos a la inflación. No pedimos nada raro, es un piso para comenzar, porque ahora ni siquiera tenemos planillas de sueldo con montos estimados", destacó el gremialista.

La modalidad consultiva de Sadop a sus afiliados difiere en el método que implementa Amsafé. Si bien ambos gremios son horizontales en sus decisiones, los docentes de los colegios privados consideran una oferta y la votan por la afirmativa o la negativa.

En el caso de un rechazo, luego se pasa a una segunda votación donde se deciden las medidas de fuerza de repudio. Así fue en este caso, donde votaron los 200 delegados de los siete departamentos del sur provincial.