El secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado de Santa Fe (ATE), Jorge Hoffman, criticó las políticas de "extorsión" promovidas por el gobierno nacional para las paritarias y destacó que el gobernador Miguel Lifschitz "tiene la oportunidad de demostrar claramente de que ésta provincia es autónoma y plantear que ésta política salarial no es viable".

En el marco de un paro de actividades de 48 horas luego del rechazo del aumento salarial del 16,5 por ciento de aumento ofrecido por el gobierno provincial, Hoffman señaló que "estoy convencido de que hay una política impulsada desde el gobierno nacional con muy fuerte presión sobre los gobernadores para que en las paritarias se negocie a la baja".

Hoffman recordó que el propio presidente Macri "lo dijo durante la firma del pacto Fiscal y a todas luces se aprecia esa presión. Cada sindicato que acepta esta presión aparece en las primeras planas de los diarios del país. Esto tiene como objetivo la rebaja del salario en la Argentina, para ser más competitivos a nivel internacional, y como un mecanismo para controlar la inflación, después de los sucesivos fracasos en esta materia".

Hoffman cuestionó luego que la apertura de la economía "nos está llevando al quiebre de la balanza comercial, el fracaso de medidas antiinflacionarias con el festival de bonos y Lebacs, con el endeudamiento. Ahora apela a los salarios. Estamos en un contexto donde el gobierno nacional chantajea y presiona a las provincias para que mantengan la pauta del 15 por ciento, que es irrisorio. Y ningún analista serio puede sostener que la inflación de este año va a ser del 15 por ciento".

El dirigente de ATE le pidió públicamente al gobernador "que no se deje presionar, que recuperemos la autonomía de la provincia de Santa Fe y discutamos con seriedad y razonabilidad la política salarial como no lo hemos hecho hasta ahora".

Consultado sobre si el Pacto Fiscal había condicionado a Lifschitz, el dirigente destacó que "sin ninguna duda condicionó a los gobernadores, fue una imposición del gobierno nacional. Fue un chantaje. Inclusive en los primeros meses de este año el gobierno nacional dejó de mandar fondos aduciendo de que no se había convalidado el Pacto Fiscal. Es un claro chantaje y subordinación de los gobiernos nacionales y esto limita las autonomías de las provincias. Pero en el caso de los salarios, el pacto limita la capacidad de negociar de la provincia".

"Por eso decimos que no vamos a aceptar la imposición del gobierno nacional. Hoy está parado el Estado provincial y mañana también y es una clara demostración del fracaso de esta política en relación a las políticas salariales. Si se insiste en este planteo se van a paralizar todos los servicios", amplió.

Y al ser consultado si consideraba que el gobernador aparecía como víctima de esta situación, Hoffman señaló que "Lifschitz aparece como víctima porque él se colocó en ese lugar. Pero tiene la oportunidad de demostrar claramente de que esta provincia es autónoma y plantear que esta política salarial no es viable".

Fuente: La Capital