Tras dos meses de incertidumbre, Fabricaciones Militares despidió a 35 empleados de la planta de armas de la fábrica de Fray Luis Beltrán, que se suman a los 60 trabajadores cesanteados en los últimos días en Villa María y Río Tercero. Desde el gremio ATE Rosario denunciaron que estos telegramas forman parte de un "proceso de apertura de importaciones salvaje" que lleva adelante el gobierno nacional, y anticiparon que "el impacto económico" en la ciudad del Cordón industrial "va a ser enorme".

"Tuvieron que venir ambulancias porque hubo trabajadores descompensados al enterarse que estaban siendo despedidos", precisó Raúl Daz, secretario general del gremio estatal, en alusión a la lista que se leyó en el ingreso al predio. No obstante eso, las fuerzas de seguridad les advirtieron que "si la asamblea se hacía adentro, nos íbamos a tener que atener a las consecuencias".

El titular de la delegación local de ATE dijo que esta situación "forma parte de un plan nacional de ajuste" en el cual ya despidieron a "280 empleados en el sector" si se cuenta a las plantas de Villa María, Río Tercero, Buenos Aires y "aún resta saber qué va a pasar con Azul". A su vez, explicó que la tarea de la empresa en Beltrán es el último eslabón de la cadena, cuya producción "está cada vez peor".

"Esto es parte del proceso de la apertura de importación salvaje que lleva adelante este gobierno junto a Astilleros Río Santiago y Yacimiento Carboníferos de Río Turbio, junto a otras industrias", denunció Daz, quien advirtió que "el impacto económico para la municipalidad de Fray Luis Beltrán va a ser enorme; ya se perdió ArZinc, que aportaba una suma importante para la TGI, sumado a que esta fábrica le da trabajo a mucha gente”.

"Hay un proceso de desmantelamiento elocuente para ganar el territorio hacia el modelo agroexportador que, lejos de retroceder, avanza", apuntó.

Para ponerlo en números, de los 1.500 empleados de planta a nivel nacional, ya fueron despedidos 280, teniendo en cuenta que "el 80 por ciento" tiene contratos anuales.

Este viernes a las 6 de la mañana está prevista una asamblea en las puertas de la fábrica, de la que participarán otras organizaciones gremiales para analizar los pasos a seguir.