El ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro, en particular, y el gobierno provincial están solicitando información sobre la investigación que se le inició al fiscal Roberto Apullán, quien ordenó intervenir el teléfono celular del funcionario, para evitar de esa manera que se sigan difundiendo escuchas telefónicas sobre temas sensibles en seguridad.

Fuentes de la cartera de seguridad indicaron que desde el Ejecutivo santafesino existe la convicción de que a Pullaro le armaron una causa que debía generar impacto electoral y ahora el objetivo está puesto en demostrar esa línea.

También trascendió que la intención del gobierno provincial es evitar que se sigan publicando el resto de las escuchas que, según se indicó, "podrían tenerlas sectores oscuros de la Policía".

Las grabaciones podrían estar relacionadas con temas sensibles para la seguridad o con órdenes operativas, como por ejemplo algunas referidas al juicio a la banda de Los Monos.

Pullaro quedó en el ojo de la tormenta a partir de la difusión de intervenciones a su teléfono celular ordenadas por la Justicia santafesina, en el marco de la causa que investiga irregularidades en las horas extras policiales.