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Subsidios al transporte: ¿federalismo o centralismo?
La ola de falsas amenazas de bomba parece no tener fin. La escalada de alarmas llegó el viernes a otro número récord: 23 llamados al 911 entre las 0 y las 18. La situación fue calificada como "muy grave" por la ministra de Educación santafesina, Claudia Balagué.
En lo que va del año escolar ya son 163 las falsas amenazas de bomba que se registraron en colegios de la ciudad. El pico de estas amenazas se dio en agosto, con 70 casos.
La ministra instó a docentes y directores a realizar un "trabajo integral" en las aulas junto a los alumnos y dio un dato revelador: "Muchas veces citamos a los padres de los autores y estaban enterados del hecho".
El pasado viernes hubo 23 amenazas falsas de bomba. Una de ellas se produjo en el Liceo Bicecchi, lo que motivó un corte de tránsito en 3 de Febrero y Buenos Aires. Por la tarde fue el turno, entre otras, de la escuela Echeverría, de Madre Cabrini y Ovidio Lagos.
Situaciones como éstas se repitieron a lo largo de la jornada y marcaron un drástico ascenso de esta problemática que impacta en las escuelas. Son 163 los llamados falsos registrados en 2017, con un pico histórico que produce alerta: agosto cerró con 70 denuncias.
Balagué se mostró preocupada por la escalada de amenazas de bomba en las escuelas de Rosario. "Hemos identificado varios casos. Siempre las mismas. Hay 5 mil establecimientos educativos pero son siempre los 20 donde pasan estas cosas", advirtió la funcionaria.
En un mensaje a la comunidad educativa, Balagué sorprendió con un dato que involucra a los adultos. "Una vez identificados, citamos a los padres y en algunos casos nos dimos cuenta de que estaban en pleno conocimiento del tema. O sea que esto siempre de cargar sobre los chicos es un error. Porque los adultos tienen los mismos criterios y quizás harían la mismas prácticas", alertó.
Frente a este escenario, la ministra de Educación santafesina les envió una recomendación a docentes y directivos de escuelas. "Se debe hacer un trabajo integral con los chicos. Hay temas a diario para abordar, como por ejemplo los atentados terroristas, las bombas, las amenazas una vez al mes en distintos centros del mundo. Tómense de ahí para abordar con profundidad qué significa amenaza con una bomba. Que vean la gravedad, evalúen que los padres serán llamados por la Justicia y ellos también. Que pueden tener sanciones y en algunos casos puede llegar hasta la cárcel. Por eso se debe explicar, educar. Si educamos bien, estas cosas no tendrían que pasar", finalizó.
En la capital provincial en al menos dos casos a los adolescentes identificados por haber producido los llamados amenazantes se les instruyó una causa. Un riesgo para quienes luego tienen proyectado el viaje de estudios fuera del país, por el obstáculo que puede significar un antecedente a la hora de otorgar una visa para el exterior.
En las escuelas están en pleno periodo de exámenes y el ardid de advertir al 911 que hay una bomba se usa para evitar los compromisos educativos. La ola parece incesante y el viernes se rompieron todos los récords: 23 llamados en un día, contra los 10 que se habían producido el miércoles pasado. Una tendencia que pone los esfuerzos policiales y la logística al extremo.
El teléfono de emergencias recibe un promedio de entre 4.500 y 5.000 llamadas diarias. Un 30 por ciento son emergencias y el 70 por ciento restante son consultas urbanas, reclamos por transporte público, bromas y amenazas de bomba mayoritariamente en escuelas y colegios. Son un promedio de 3.800 llamadas falsas en un mes.