Silvia Scimini, asesora técnica del servicio telefónico del 911, reveló que del total de llamadas que se reciben durante el día, unas 5.600 en promedio, "sólo 35 por ciento son realmente comunicaciones constatadas de emergencias". El resto se reparten entre llamadas de aviso de bomba (la mayoría), otro tipo de bromas o directamente pedido de servicios.

Scimini señaló que la mayoría de las bromas están relacionadas con los avisos de bombas. "Las amenazas de bombas que son las quedan registradas porque hay que seguir un protocolo. A veces queda un número registrado de un celular y también el audio. Esa información se envía a Fiscalía para que empiece una investigación. Hemos detectado que muchas llamadas parten de un mismo número". "Desde el Ministerio de Seguridad pedimos un uso responsable de este servicio. Se afectan muchos recursos para atender cada llamada por aviso de bomba. En otros casos de bromas, van los móviles, constatan que el hecho fue negativo y queda todo allí. Pero en las denuncias de bombas hay que activar un protocolo. Eso requiere la movilización de entre 30 ó 40 personas por cada llamada", agregó.

 

Scimini dijo que durante mayo hubo 23 llamadas por aviso de bombas, de las cuales siete fueron en el instituto Politécnico. "El resto pertenecen a comisarías, la EPE, la Terminal de Omnibus, el Aeropuerto o algún shopping. Cuando cerremos este mes, las llamadas sobre el Politécnico serán más, porque coinciden con las fechas de exámenes. Esta fecha, entre mayo y julio, se incrementan. Después vuelven a subir entre octubre y noviembre y bajan en el verano", señaló la funcionaria.