Con los nuevos valores del costo del servicio en mano, titulares de licencias y el gremio que agrupa a los peones de taxis concurrirán hoy al Concejo para reclamar una inmediata actualización tarifaria. Y, de no obtener una respuesta favorable, prometieron que habrá conflicto.

"Demasiada paciencia tuvimos por ser un año electoral", disparó Horacio Boix, del Sindicato de Peones de Taxis de Rosario (SPT). Días atrás, la Municipalidad había admitido que la tarifa de taxis está atrasada un 22 por ciento.

De hecho, el Ente de la Movilidad ya aprobó el último estudio de costos del servicio y estipuló que la bajada de bandera real es de 10 pesos y la ficha que se paga cada 100 metros es de 50 centavos.

"Iremos a la comisión de Servicios Públicos del Concejo a plantearles a los ediles que tengan en cuenta el último estudio de costos y aprueben un aumento de la tarifa sin más demoras", insistió Boix.

En ese sentido, el gremialista dijo que los peones no aceptarán "que se demore el tratamiento del aumento, porque hace ya casi un año que se aprobó el último incremento".

Para Boix, "todo subió pero los salarios de los choferes siguen igual" porque está atado, por convenio, al precio de la ficha, multiplicado por 8.400 unidades.

Lo cierto es que el sector espera que el aumento salga a la luz el jueves. "La idea es que puede empezar a aplicarse a mediados de noviembre, pero si hay demoras seguro terminaremos en un conflicto porque más no podemos esperar", afirmó.

El presidente de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar), José Tornambé, sostuvo que la nueva tarifa del servicio "tiene que aplicarse antes de fin de año" y le exigió al Concejo que debata el tema porque "la inflación es galopante".

"Estos números se hablan o analizan desde hace unos cuantos meses. Pensamos que pueden ser un poquito más alto. De acuerdo a lo que dice el ente, y la situación que atravesamos, sería conveniente aplicar el reajuste antes de fin de 2013 y ver lo que ocurre en los primeros meses del año próximo", sostuvo Tornambé.

"Se venían las elecciones en el medio y dijimos que íbamos a esperar que pasara todo ese proceso para que el Concejo tratara el tema de una vez por todas. Después viene diciembre, el mes de las fiestas, y el cuerpo entra en receso y la tarifa tiene que estar aplicada antes de fin de año. No se si por completo o una parte, antes de 2014", concluyó el dirigente.

Mario Cesca, de la la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti), enfatizó: "Fuimos respetuosos de los tiempos electorales, pero los comicios ya pasaron y los costos siguen subiendo en un contexto inflacionario".

Por eso les pidió a los concejales que "resuelvan el tema políticamente y eviten un conflicto".

Días atrás, el gremio de los peones reclamó formalmente a los titulares de licencias el llamado a paritarias para ajustar los salarios. "No tenemos margen para subir los sueldos si no hay aumento de tarifa", alertó Cesca.

Los peones procuran cerrar una pauta salarial cercana al 25 por ciento para 2014, en dos tandas, para que sea homologada esta semana por el Ministerio de Trabajo provincial.

En ese contexto, el gremio y el sector patronal no descartan que haya medidas de fuerza si el Concejo demora la aprobación del ajuste en la tarifa.

Sin embargo, al menos hasta el viernes rige la conciliación obligatoria dictada por la cartera laboral frente a los recientes reclamos por la inseguridad, instancia que impide la concreción de huelgas.

En base a la fórmula polinómica armada por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), el relevamiento del ente determinó un importante desfasaje con los valores actuales.

El trabajo estadístico arrojó que la bajada de bandera debe ubicarse en 10,06 pesos, frente a los 8,25 vigentes. Y la ficha que se abona cada 100 metros recorridos debe pasar de 41 a 50 centavos.

El estudio fue aprobado por unanimidad y debe llegar al Palacio Vasallo para que los ediles cuenten con la información técnica actualizada.

Fuente: La Capital