El gobernador Antonio Bonfatti se reunió con el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Luis Segura, y los titulares de Central, Newell's, Colón y Atlético Rafaela, para analizar el tema de la seguridad en los estadios y articular acciones para que el público visitante pueda volver a las canchas.    “Por primera vez en la historia de la provincia, los cinco clubes de fútbol están jugando en primera división”, recordó el gobernador tras el encuentro, para luego agregar: “Tenemos que trabajar juntos y todos al mismo tiempo; contar con un protocolo y una metodología de trabajo común para evitar inconvenientes”.    De la actividad, que se realizó en la sede de la AFA, participaron los presidentes del Club Atlético Newell's Old Boys, Guillermo Lorente; del Club Atlético Rosario Central, Raúl Broglia; del Club Atlético Colón, Víctor Godano; y de Atlético Rafaela, Homero Ingaramo. También Mario Giammaría, en representación del fútbol de Rosario.   “Desde el Estado asumimos la responsabilidad de esta convocatoria porque hemos destinado recursos, y lo seguiremos haciendo, a todos los estadios de fútbol para que instalen dispositivos tecnológicos para mejorar la seguridad, pero con esto no alcanza”, sostuvo Bonfatti.    “Entiendo la situación de los clubes y el condicionamiento de los inadaptados. Por eso todos los actores involucrados -dirigentes, directivos de la AFA, la Policía y la justicia- tienen que ser capaces de dar respuestas efectivas. Esto es lo que estamos buscando. Ya hemos hablado con el fiscal general de la provincia, Julio de Olazábal, hemos tenido una conversación informal con el presidente de la Corte Suprema de la provincia, Roberto Falistocco; y la semana que viene los convocaremos para tratar, con el compromiso de la AFA, de minimizar esta problemática”, concluyó el gobernador.   Con respecto a la respuesta del presidente de la AFA, Bonfatti sostuvo que “Segura se comprometió a trabajar en conjunto con la provincia de Santa Fe y a seguir adelante con el tema de AFA Plus, más allá de la disolución del contrato con Telecom, con el objetivo de erradicar la violencia en el fútbol argentino”.