A propósito del gran revuelo que generó en la ciudad y en la provincia la posible implementación de la ley de descanso dominical, la Asociación Empresaria de Rosario publicó un escrito basándose en un análisis realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, en el que se refleja que la implementación no afectará el nivel de ventas y por ende tampoco la variable de empleo. La explicación de los responsables del análisis radica en que las decisiones ahorro y consumo de las familias no se toman en función del horario de apertura comercial, sino en función del presupuesto y sus necesidades. El trabajo deduce que si los comercios cierran el domingo, lo que se deje de comprar ese día será adquirido de lunes a sábado, como ya está sucediendo en muchas ciudades de la Argentina. Durante 2013, el presupuesto de las familias destinado a consumo de bienes fue aproximadamente de $635.688 millones. De ese monto, se puede estimar que $568.251 millones se gastó de lunes a sábado y $67.437 millones los domingos, principalmente en supermercados y shoppings. El estudio establece que si esas grandes cadenas hubieran permanecido cerradas el domingo, “sin dudas” esos $67.437 millones se hubieran gastado de lunes a sábado. Según estimaciones, si se aplicara el cierre dominical en todo el país, sólo por ese efecto las anuales en los comercios de calle y avenida deberían aumentar 5% mientras que en supermercados y shoppings deberían caer 8,2%. “Sin embargo, en los hechos esa nueva distribución quedará sujeta a las estrategias de mercado de las empresas y por ese motivo, la fundamentación para llevar adelante despidos no es válida”, concluye.