Carlos Berlocq volvió a ser el héroe en una serie de Copa Davis. El tenista de Chascomús le dio el punto definitivo a la Argentina en el repechaje ante Israel disputado en Sunrise, Estados Unidos, y le permitió al combinado "Albiceleste" evitar el descenso y conservar su plaza dentro del Grupo Mundial, lugar que ocupa desde el 2002.

El número 67 del mundo le ganó por un claro 6-2, 6-3 y 6-0 al juvenil israelí Bar Tzuf Botzer, que ocupa el puesto 776 del ranking de la ATP.

Las perspectivas para la Argentina se habían complicado luego de que el equipo asiático ganar el dobles del sábado y pusiera la serie 2-1 a su favor, lo que obligaba a ganar los dos singles del domingo. Sin emabrgo, los capitaneados por Martín Jaite sacaron adelante la serie a pesar de la adversidad y lograron mantener la tenis nacional dentro de la élite mundial.

Fue la primera vez en 24 años en que Argentina pudo dar vuelta una serie en la que llegó con desventaja al último día. Este repechaje marcó el fin del ciclo de Jaite como capitán del equipo.

A Berlocq se lo vio concentrando desde el primer minuto del encuentro. Con gran solidez, el tenista de Chascomús le hizo sentir la diferencia de ranking al israelí y consiguió dos quiebres seguidos en el inicio para lograr una pronta ventaja de 4-0. A pesar de que el juvenil Botzer complicó en algún juego de saque a "Charly", el argentino pudo imponerse con decisión para quedarse con el primer parcial por 6-2.

En la segunda manga Berlocq no logró sacar una diferencia tan amplia como en la primera, pero solo le alcanzó con un quiebre para cerrarla por 6-3 y estirar la ventaja en el marcador.

En el set final, "Charly" fue demoledor y no le dio opciones a Botzer. Con un 6-0 puso punto final a su partido y a una serie emocionante para la Argentina. El de Chascomús celebró el triunfo con el ya típico destrozo de su remera.

La esperanza argentina creció con Mayer:

Leonardo Mayer llegaba al primer single del domingo con la obligación de ganar para mantener las chances de Argentina de seguir luchando por sostener su plaza dentro del Grupo Mundial de la Copa Davis. Una derrota hubiese significado el fin de la historia para la serie, ya que con la victoria en el dobles del sábado, el elenco israelí había conseguido una valiosa ventaja de 2-1.

A pesar de este gran peso, el argentino mostró un tenis casi sin fisuras y consiguió una sólida victoria que le permite a los capitaneados por Martín Jaite confiar en seguir en la élite del tenis mundial. Mayer le ganó a Dudi Sela, 84 del mundo, y primera raqueta de Israel, por 6-2, 6-1 y 6-4.

Ambos tenistas habían sido los ganadores de sus puntos el viernes y en este encuentro se veían las caras por primera vez en su carrera.

A diferencia del viernes, Mayer supo sortear con soltura la presión que le imponía el encuentro en el comienzo. De esa manera, quebró en el sexto juego y sacó una diferencia que le dio confianza para romper nuevamente el servicio de Sela en el octavo. Así, cerró el primer parcial por 6-2 a su favor.

La intensidad del correntino se mantuvo durante el inicio de la segunda manga y eso le permitió quedarse con el servicio de su rival para escaparse en el marcador. Con golpes de gran potencia, el "Yacaré" doblegó a su rival y consiguió un nuevo quiebre en el sexto juego para, finalmente, redondear un contundente 6-1.

Ya en el tercer parcial, Mayer mantuvo la regularidad y quebró en el quinto juego. En el siguiente, dio una muestra de carácter al remontar tres chances de quiebre en favor de Sela. El tenista argentino supo mantener la diferencia hasta el final y redondeó el encuentro con un 6-4.

"Jugué como cualquier partido. No pensé que estaba en una Copa Davis.Estoy contento por todo, por la Argentina", dijo el tenista, que ocupa el número 25 del ranking de la ATP y que es la primera raqueta de la Argentina.

Respecto a su desempeño en el encuentro, señaló: "Arrancamos tensos los dos, pero le saqué ventaja rápido. Ahí me relajé y empecé a jugar mejor. De todos modos, no importaba cómo se ganaba, solo importaba el triunfo".