Un nuevo capítulo en la crisis de la fábrica de cosechadoras Vassalli se dio este viernes en una audiencia en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe entre los propietarios de la empresa de Firmat, y el gremio.

A principios de octubre, se había logrado un acuerdo de pago a trabajadores firmado por ambas partes, pero desde entonces no se volvió a reactivar la producción ni se realizaron los pagos de salarios adeudados.

El titular de la UOM de Firmat, Diego Romero, destacó que en la audiencia uno de los dueños de la firma les aclaró que “no tiene plata para pagarle a la gente, pero abrió una ventana por la posible venta de la empresa”.

Romero detalló que el propietario dio a conocer que “no tiene plata para pagarle a la gente lo que resta de la quincena, y menos para pagarle el acuerdo de deuda que se firmó hace poquito más de un mes”.

Ante esa situación, el dirigente reclamó al Ministerio “que se caiga el convenio porque éste no se cumplió”.

Una salida en la venta

El dirigente gremial destacó entonces que tras la audiencia “lo más importante es que Mateo Marsó manifestó que estarían en tratativas y dispuestos a vender la empresa. Sabemos que hay algunas negociaciones dando vueltas, y vamos a esperar”.

La audiencia pasó a un cuarto intermedio por dos semanas, a pedido de la firma, “para ver cómo siguen las negociaciones para definir la situación de la empresa”. Y luego sentenció: “O arreglan la situación y la venden, o la empresa lamentablemente terminará cerrando sus puertas porque de esta manera no puede continuar”.

Vassalli produce cosechadoras de dos marcas: Don Roque y Vassalli. Cuenta con tres plantas fabriles ubicadas en Firmat con capacidad de producción de 600 unidades al año.

La familia Marsó adquirió la planta de Vassalli hace casi dos años, y desde principios de 2025 está en conflicto.