El tramo de la autopista de la Ruta Nacional 9 que conecta Funes con Roldán, en la mano hacia Rosario, volvió a encontrarse en un estado de alerta para la circulación. La carpeta asfáltica presenta desgastes, hundimientos y roturas que evidencian la falta de mantenimiento, por lo que se recomienda extrema precaución al transitar por la zona.

Los trabajos de reparación más recientes se habían realizado entre 2021 y 2022, con el objetivo de mejorar la calzada luego de años de deterioro. Las obras incluyeron el fresado de deformaciones, tareas de bacheo por sectores y la repavimentación completa de ambos carriles en el sentido hacia Roldán.

En aquel momento, la inversión de Vialidad Nacional alcanzó los 782 millones de pesos, destinados a la recuperación integral del corredor vial. Sin embargo, a menos de tres años de aquellas intervenciones, el tramo vuelve a mostrar un notorio desgaste que reaviva la preocupación de los automovilistas y vecinos de la región.