La Canasta Básica Alimentaria (CBA) de Rosario llegó a $ 113.525 en marzo. Este valor representa una suba de 2,2% con respecto al mes anterior, según el último informe de la Usina de Datos de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Si bien el porcentaje de aumento podría parecer bajo, en comparación al termómetro del bolsillo que se siente cada vez que se van hacer las compras diarias, al tomar en cuenta la variación interanual alcanzó el 412,2%.

Desde noviembre, cuando se realizaron las elecciones presidenciales que le dieron la victoria a Javier Milei, hasta marzo, el costo de la canasta de alimentos básicos se incrementó 97,2%. Saltó de $ 57.569 a $ $ 113.525.

Los rubros que registraron mayores aumentos de precios en términos porcentuales durante marzo fueron las verduras y hortalizas (29,9%), las raíces y tubérculos (25,5%), los lácteos (19,7%) y los condimentos (16,7%).

Entre marzo de 2023 y 2024, la CBA aumentó todos los meses y diciembre del año pasado se convirtió en el mes con el incremento más pronunciado: subió 34%.

El informe que elabora la Usina de Datos de la UNR detalla que en marzo de 2023 la variación había sido de 5,6%, en abril 9,9%, mayo 8,8%, junio 5,8% y julio 5,2%. Con el inicio del calendario electoral en agosto el indicador pegó un salto y llegó a 25,8%, en septiembre marcó un alza de 18,9%, en octubre 9,5%, noviembre 19% y diciembre se disparó a 34% con la llegada de Javier Milei al gobierno y la devaluación que superó el 100%. En enero de 2024 se incrementó 18,4% y en febrero 21,6%.

El aumento de la CBA Rosario del 2,2% en marzo con respecto al mes anterior, en valores absolutos, llegó a $113.525, lo cual implicó un incremento de $2.477.

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dará a conocer el próximo viernes 12 de abril la inflación de marzo.

El informe de la Usina de Datos resalta que un hogar de cuatro miembros, integrado por un varón de 40 años, una mujer de 35 años y dos varones de 17 y 15 años debió tener en marzo un ingreso superior a $432.531 para satisfacer sus necesidades alimentarias básicas y superar, así, la línea de indigencia.

En tanto, un hogar compuesto por tres integrantes, dos mujeres de 30 y 32 años y una hija de 4 años, necesitó un ingreso superior a $237.268 para satisfacer sus necesidades alimentarias básicas. Un hogar compuesto por cuatro integrantes, una mujer de 35 años y tres hijos de 12, 9 y 6 años, demandó un ingreso mínimo de $334.900 para adquirir los alimentos básicos para su subsistencia.

Una forma sencilla de analizar los datos es evaluar el poder de compra de diversos tipos de ingreso, como el haber mínimo jubilatorio, la Pensión Universal para el Adulto Mayor, el Salario Mínimo Vital y Móvil y la Asignación Universal Por Hijo, en función de la cantidad de Canastas Básicas Alimentarias que es posible adquirir con cada uno de ellos. Así, durante el mes de marzo la Jubilación Mínima aumentó un 27,2%, la Pensión Universal para el Adulto Mayor un 46,5%, Salario Mínimo Vital un 30,0% y Móvil Asignación Universal por Hijo un 6,5% lo que representa un aumento en términos de CBAs de 24,4%, 43,3%, 27,2% y 4,2% respectivamente.

La CBA comprende un listado de alimentos y cantidades necesarias para cubrir los requerimientos nutricionales de un hombre de 30 a 60 años por mes. Si se considera que estos requerimientos varían en función del sexo y la edad de las personas, se utiliza la tabla de equivalencias de necesidades energéticas para calcular el tamaño del hogar, medido en unidades de adulto equivalente. Así, se determina un valor específico para la Canasta Básica Alimentaria de cada hogar. La canasta no incluye la energía, el agua y otros elementos necesarios para lavar los alimentos, cocinarlos, calentarlos y/o conservarlos. Tampoco incluye el resto de los productos y servicios básicos no alimentarios que componen lo que se denomina Canasta Básica Total, cuyo valor da origen a la Línea de Pobreza.

Paula Durán, coordinadora de Usina de Datos UNR, explicó que la desaceleración del aumento de la canasta básica de marzo tiene que ver con que “el precio de algunos rubros disminuyó” pero advirtió que aún resta por dilucidar si se trata de una tendencia o un episodio único. “Veremos qué pasa en abril. El precio de los alimentos quedó en un nivel muy alto, que no fue acompañado en la recomposición de los haberes y tenemos una perdida de poder adquisitivo en casi todos los estratos respecto de este rubro tan importante que son los alimentos y se llevan un porcentaje muy alto del ingreso en los hogares”, apuntó la licenciada en Ciencia Política y magister en políticas sociales.

Fuente: La Capital