La inflación hace estragos en las compras de los rosarinos. A horas de conocerse el índice de septiembre, también estimado en dos dígitos, desde la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Rosario (Casar)revelaron que la caída sostenida del consumo ya supera los 100 días y que en el último mes se registraron aumentos sostenidos que oscilan entre un 8 y un 12%. "La gente está muy enojada con los aumentos y se aferra mucho a todo tipo de programa o beneficio que ayude a mantener su poder adquisitivo", aseguró el titular de la Cámara, Sergio López.

El Índice de precios al consumidor registró un alza mensual de 12,4% en agosto de 2023, y acumuló una variación de 80,2% en lo que va del año. En la comparación interanual, el incremento alcanzó el 124,4%. Los especialistas pronostican una cifra también de dos dígitos en septiembre.

Consultado sobresi hubo un amesetamiento de precios o continuaban las alzas López indicó: "Seguimos recibiendo listas con aumentos de precios. Ante una movida del tipo cambiario eso siempre redunda en algunos puntos para arriba".

Respecto a en cuánto colaboraban las medidas de refuerzo del gobierno y distintos programas, como Precios Cuidados o Billetera Santa Fe o la devolución del IVA, para mitigar el impacto en la economía familiar, López dijo que "los programas del gobierno han quedado prácticamente en el olvido. La verdad es que con la inflación que tenemos es imposible que las empresas entreguen mercadería con un precio pactado de antemano".

El dirigente supermercadista indicó que la suba de precios en el corriente mes "va del 8 al 12%”. Eso se da en algunos productos que van atados al tipo de cambio, como aseo personal o perfumería" al tiempo que destacó que también existen alzas en los "que principalmente son de consumo masivo, como harinas, aceite, fiambres, lácteos, bebidas. La verdad es que ninguno se queda corto".

El titular de Casar resaltó que "ya van más de 100 días que venimos con fuertes caídas en el consumo y las medidas del gobierno en algo han ayudado a fortalecer un poco más el consumo pero no alcanzan".

"La situación es bastante compleja porque el consumidor no convalida cualquier número",agregó el supermercadista quien resaltó además que la gente ha bajado sus exigencias en cuanto al valor de un producto. "El que antes compraba un producto de tal marca y tal precio, ahora busca la alternativa menor o segundas marcas. Va cambiando el tipo de consumo y se aferra mucho a todo tipo de programa o beneficio que ayude a mantener su poder adquisitivo".