Los dos automovilistas que fueron detenidos la semana pasada por correr una picada en la que, tras chocar contra otro auto mataron a Mario Esquivel, en la esquina de Mendoza y Brasil, fueron imputados este lunes como autores de homicidio simple con dolo eventual en concurso real con el delito de prueba de velocidad y destreza sin la debida autorización ilegal.

Esa fue la tipificación legal que aplicó este lunes la jueza de Primera Instancia Silvia Castelli a requerimiento de las fiscales Mariana Prunotto y Valeria Piazza Iglesias, de la Agencia de Siniestralidad Vial de la Fiscalía Regional Rosario. En la misma resolución, la magistrada dispuso que los dos acusados queden detenidos en prisión preventiva por el tiempo máximo que establece la ley (dos años) mientras la causa judicial avanza hacia el juicio.

Las fiscales Prunotto y Piazza Iglesias les atribuyeron a Adriel Nicolás Moreno y Damián Alejandro Balduma responsabilidad penal en el hecho ocurrido el 20 de agosto minutos antes de las 3 de la madrugada. Las funcionarias señalaron que la muerte de Esquivel se produjo cuando Nicolás Moreno circulaba por calle Mendoza en sentido este a oeste al mando de un Peugeot 206, corriendo una carrera callejera junto a Damián Balduma, quien manejaba un auto de color azul.

De acuerdo a la acusación formalizada, cuando ambos conductores llegaron a la intersección con calle Brasil, el Peugeot que era manejado por Nicolás M. impactó contra el automóvil Suzuki Fun que venía por Brasil, y en el que iban cuatro personas, entre ellas Mario Esquivel, quien falleció en el acto producto del golpe.

Las fiscales señalaron que el accionar de Nicolás Moreno y de Damián Balduma “fue determinante para la producción del siniestro vial, ya que ambos consecuentemente tenían el dominio del hecho contribuyendo así al resultado típico. Ambos se representaron el resultado como una posibilidad seria, sin que ello haya implicado desistir o renunciar a dicha acción inusitadamente peligrosa para la vida de otras personas y para ellos mismos”.

Las funcionarias judiciales remarcaron que los dos automovilistas que corrían la picada “actuaron con dolo eventual en razón que siendo las 02.55 de la madrugada, venían realizando pruebas de velocidad y destreza sin la debida autorización legal, en una zona prohibida a tal fin, a gran velocidad, y en una intersección semaforizada y sumamente transitada”.