Tony Bennett murió a los 96 años. Dueño de una de las voces más reconocidas de la música, estuvo en actividad hasta los 95, cuando se despidió con un gran último concierto lleno de estrellas en el día de su cumpleaños.

Su publicista, Sylvia Weiner, confirmó la muerte de Bennett a la agencia AP y dijo que murió en su ciudad natal de Nueva York. Si bien no se dieron a conocer las causas específicas, el artista convivía con Alzheimer desde 2016.

Además de conquistar a varias generaciones con temas como “I left my heart in San Francisco”, y grabar con grandes figuras del jazz, Bennett se mantuvo vigente hasta sus últimos días. En su última década, se dedicó a reconocer el talento joven y grabar con artistas contemporáneos. De hecho, generó un vínculo muy cercano con Lady Gaga, quien lo acompañó a interpretar “I've Got You Under My Skin” en el recital de despedida que Tony dio en el mítico Radio City Music Hall de la Gran Manzana.

En 2014, a los 88 años, Bennett rompió su propio récord como el artista vivo de mayor edad con un álbum número 1 en la lista Billboard 200 por "Cheek to Cheek", su proyecto de duetos con Lady Gaga. Tres años antes, había encabezado las listas con el disco “Duets II”, en el que incluyó grabaciones con estrellas Carrie Underwood y Amy Winehouse, en su última grabación de estudio.