El coordinador del Consejo Asesor de Vivienda, Ariel D’Orazio, sostuvo que derogar la ley de alquileres, tal como lo impulsa la oposición en el  Parlamento, tiene que ver con un cabal interés de dejarle el camino libre a las corporaciones inmobiliarias en lugar de atender la realidad que afrontan los inquilinos, quienes están cada vez más asfixiados como consecuencia de la inflación galopante. "Decir que los inquilinos se están enriqueciendo a costa de los propietarios es una barbaridad que no tiene sentido", disparó. Para D'Orazio, la solución podría estar en la modificación de los valores de referencia. Desde las empresas inmobiliarias apuntan a corregir dos artículos de la nueva ley.

Las declaraciones de D'Orazio surgieron a propósito de la sesión que fracasó este miércoles en Diputados, donde sectores de la oposición tales como Juntos por el Cambio, aliados y libertarios proponían derogar la ley y rediscutir una nueva normativa. Ese proyecto quedó entonces en veremos para después de las Paso.

"Hay diputados que se hacen eco de la corporación inmobiliaria para la derogación de la ley de alquileres al afirmar que los inquilinos se están enriqueciendo a costa de los propietarios, lo cual es el pensamiento que impulsa la caducidad de la ley en lugar de pensar el acceso a la vivienda", enfatizó D'Orazio.

En ese sentido, sostuvo que la ley puso "previsibilidad" en los valores del alquiler, que sean anuales por un indicador oficial para que los precios crezcan por debajo de la inflación. En cambio, aseguró que una derogación de la ley no va a modificar ni morigerar para bien de las personas que alquilan, sino para mejorar las expectativas de rentabilidad de los propietarios.

Para el coordinador del Consejo Asesor de la Vivienda se derogarían muchísimos avances tales como el plazo mínimo de tres años, la exención al cobro de expensas extraordinarias, impuestos que gravan la propiedad y hoy están a cargo de los propietarios, entre otros ítems que establece la ley de alquileres. "Es hacerle el caldo gordo a las corporaciones inmobiliarias y no mirar cuáles son las necesidades de vivienda que tiene la mayoría de las familias, que no pueden acceder al techo propio", puntualizó.

"La ley no establece el precio inicial de contratación; en todo caso, se deberían modificar la ley para que fije el valor inicial y que se creen valores de referencia a fin de alivianar el costo inicial para quienes alquilan. Pero pedir aumentos cada seis meses a ojo o por el IPC encarece claramente el valor de renta y solo beneficia al propietario y a la empresa inmobiliaria", planteó.

En tanto, el presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, Alejandro Bennazar propuso que más que derogar la ley habría que corregir dos artículos y hacer un trabajo mucho más extenso. "Hay que reducir el tiempo de duración de los contratos de tres años a dos y actualizar el índice de indexación cada tres meses, en lugar de cada año", sostuvo.

Fuente: La Capital