En tiempos de regulaciones, restricciones, cupos y cepos florecen las evasiones, las especulaciones y los rulos. De estos últimos, los financieros son los más comunes o conocidos, pero el mundo del turismo tiene algo con que sumar al universo de las operaciones que caminan al borde de la legislación. La Asociación Rosarina de Agencias de Viajes (Arav) alertó sobre distintas prácticas que se están llevando a cabo en la industria del turismo emisivo internacional para evadir el pago, total o parcial, del 100% de percepciones que se aplican sobre el valor del dólar oficial a la hora de expender servicios internacionales, como ganancias, impuesto país e ingresos brutos.

Una de aquellas operatorias tiene como eje central los servicios que prestan las agencias de viaje de la ciudad para los viajes al extranjero (hoteles, excursiones y alquileres de autos, entre otros). En este caso, las agencias minoristas son las que actúan como agentes de percepción, es decir las que deben cobrar los impuestos que encarecen los valores y, aun con aquella responsabilidad a cuestas deciden, lisa y llanamente, no hacerlo o llevarlo adelante parcialmente tributando únicamente algunos de los servicios.

No son pocas las que acomodan los importes o tributan sólo por algunos servicios y dejan el resto afuera.

Para vender pasajes aéreos la cuestión se complica un poco, pero, en la era de la hiper comunicación no hay cuestión que no pueda resolverse. En los vuelos, son las aerolíneas las que perciben impuestos y ya no las agencias de turismo, por lo que desde el principio en el costo del viaje está contemplada la carga impositiva.

En condiciones regulares, las operadoras mayoristas locales de turismo son las que compran los viajes a las aerolíneas con destino a satisfacer la demanda de las agencias de viajes, sin embargo, muchas agencias minoristas comenzaron a adquirir vuelos directamente en el exterior.

En principio, la operatoria no constituye ninguna falta, a menos que esa adquisición de vuelos en el exterior sea a precio de dólar oficial acompañado por facturaciones engañosas y fraudulentas para encubrir el pago de los aéreos bajo otras categorías, modalidad denunciada ante la Arav. La manipulación de los recibos permite evadir todas las regulaciones sobre el turismo internacional, como ganancias, ingresos brutos y el impuesto país.

Presupuesto de agencia minorista sobre vuelo a Panamá por un valor de $876.000.

Valor efectivo del mismo vuelo a Panamá obtenido con la operatoria legal, su costo $1.122.582

Evidentemente, quienes se embarcan en estas manipulaciones se encuentran en una posición de fuerte ventaja ante quienes no, ya que prácticamente reducen a la mitad el precio del viaje.

Otra forma de evadir responsabilidades impositivas es la asociación de las agencias con entidades exentas de algunas de las cargas tributarias. En los últimos meses, ganó mucho terreno la unión entre agencias y clubes, debido a que los últimos están exentos de pagar el 45% de ganancias y el 25% de bienes personales. Sólo abonan el 30% de impuesto país, a un tipo de cambio de $345,73 en vez de $465,40.

En este marco, llamaron poderosamente la atención las falencias estatales a la hora de controlar la operatoria de las compañías. Esta cuestión no debería escaparse en un examen minucioso de las cuentas que las agencias rinden ante la Afip, sin embargo lo hacen.