La Canasta Básica Alimentaria (CBA) subió 6,8% en enero en la ciudad de Rosario, respecto del mes anterior, detalló el último informe de la Usina de Datos de la UNR. De esta forma se cortó la desaceleración que había registrado el indicador durante diciembre cuando sólo había subido 2%.

La variación del primer mes del año estuvo impulsada fundamentalmente por el aumento del precio en las categorías legumbre, aceites y grasas y verduras y hortalizas. El aumento interanual, respecto al costo de la CBA en el mismo mes del año anterior fue de 92%, se observó.

“Luego de los picos de los meses de septiembre y octubre de 2022 cuando la CBA registró incrementos del 7,9% y 9,5% respectivamente, y luego de la desaceleración en el incremento de precios llegando en diciembre a un piso de 2%, durante el mes de enero nuevamente se volvió a evidenciar un brusco incremento de precios”, explicaron desde la Usina de Datos de la UNR.

El aumento de 6,8% en el mes de enero de 2023 con respecto al mes anterior en valores absolutos implicó un incremento de $1.189 por CBA.

Los rubros que registraron mayores aumentos de precios en términos porcentuales fueron legumbres con un alza del 12,8%, aceites y grasas un 12,4%, verduras y hortalizas subieron 11,3%. Los rubros que registraron una disminución de los precios en términos porcentuales con respecto al mes anterior fueron raíces y tubérculos, 0,7%.

Con el alza de 6,8% de enero un rosarino de entre 30 y 60 años necesitó como mínimo $18.676 mensuales en enero para adquirir alimentos y no quedar, por tanto, bajo la línea de indigencia. En tanto, un hogar de cuatro miembros, integrado por un varón de 40 años, una mujer de 35 y dos varones de 17 y 15 años debió tener un ingreso igual o superior a $71.156 para satisfacer sus necesidades alimentarias básicas.

En tanto, durante el mes pasado la jubilación mínima, la pensión universal para el adulto mayor y la asignación universal por hijo no aumentaron, por lo tanto representaron una pérdida en termino de CBAs de 6,8%, el salario mínimo vital y móvil aumentó y la pérdida significó en términos de CBAs de 1,1%, se indicó.

La canasta que releva la Usina de Datos no incluye la energía, el agua y otros elementos necesarios para lavar los alimentos, cocinarlos, calentarlos o conservarlos. Tampoco incluye el resto de los productos y servicios básicos no alimentarios que componen lo que se denomina canasta básica total, cuyo valor da origen a la línea de pobreza.