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12:00:50 16/01/2023

La temporada de turismo es buena, pero está lejos de lo que fue el año pasado

La ocupación en los principales destinos turísticos en la primera quincena de enero fue de entre 85 y 95%, con una fuerte presencia de turistas extranjeros, según informó la agencia estatal Télam en base a datos de la Cámara Argentina de Turismo. Sin embargo, empresarios  hoteleros de Mar del Plata y otros destinos tradicionales señalan que la ocupación es mucho menor que el verano pasado y que el turista ocupa las plazas más económicas y gasta poco. Los aumentos en hoteles y gastronomía y el deterioro de los salarios durante 2022 serían las causas principales.

Según datos de la Cámara, los niveles de ocupación de esta primera quincena “son muy similares a los del 2022”.  La Cámara destaca la recuperación del turismo receptivo: considerada la mejor de los últimos 15 años. “La proyección para la temporada es de 1.7 millones de turistas del extranjero, lo que generaría un impacto económico superior a los 1370 millones de dólares”. Proceden de Brasil, Estados Unidos, Uruguay y Chile.

De acuerdo al nivel de gastos de los turistas y proyectándolo a toda la temporada, se estima que la temporada de verano movilizará más de un billón de pesos (5,6 mil millones de dólares al cambio oficial).

“Estamos viviendo un gran verano, con muy buenos niveles de ocupación, similares a los de la histórica temporada del 2022”, dijo el ministro de Turismo, Matías Lammens. Y agregó que “también será intenso el movimiento turístico durante la segunda quincena de enero y todo febrero en los principales destinos del país”, afirmó con optimismo Lammens.

Gustavo Hani, presidente de la Cámara Argentina de Turismo, dijo que luego de los primeros días del mes de enero, “podemos confirmar que tendremos una gran temporada de verano con altos niveles de ocupación general, tanto en los destinos turísticos tradicionales como en los emergentes”. “La gran novedad es que, en muchos de estos destinos, no solo se aprecia la fuerte presencia del turismo nacional, sino que también se comienza a registrar un importante flujo de arribos de turistas extranjeros con el correspondiente impacto de ingreso de divisas que ello genera”, destacó.

Pero en los grandes balnearios de la Costa Atlántica el optimismo es escaso. Se afirma que la ocupación se ubica entre 70% y 80%, a la vez que bajó el promedio de días de estadía y disminuyó el monto diario que gastan las familias. El contraste entre este enero y el de 2022 es notorio. En cantidad de turistas y en el nivel de consumos. La ausencia del plan PreViaje se hace sentir, así como la caída del salario real a lo largo de 2022 por la inflación, que cerró el año apenas por debajo del 100% según datos oficiales.

“La ocupación hoy está en el 70%, 15 puntos porcentuales abajo que el año pasado para la misma época.  Y mientras que en 2022 se ocupaba de mayor a menor costo de alojamiento, hoy es al revés. Primero se ocupan las habitaciones más económicas. El consumo en general está muy gasolero”, comentó el presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Mar del Plata, Jesús Osorno. El contraste con el informe de la Cámara Argentina de Turismo no puede ser mayor. El dirigente, dueño del hotel Tronador, señala que si bien el segmento ABC1 sigue consumiendo, “el turismo medio que llega a Mar del Plata no está gastando, cuida el bolsillo”.

En lo que respecta a gastronomía, hay movimiento en los locales de las zonas céntricas o en la peatonal, donde las familias eligen pizzas o menúes económicos, pero los restaurantes gourmet no están con mucha demanda. El verano pasado, muchos restaurantes de nivel debían ofrecer dos y tres turnos paraatender la demanda. Hoy esto no sucede.

Con respecto a la estadía, mientras que en 2022 el promedio era de 10 días, ese número bajó a 4/5 días; y comenzó tarde, por el Mundial y las Fiestas con mal tiempo.

Osorno reconoció que la caída en la ocupación pudo haber tenido que ver con la fuerte suba de precios que registraron los rubros vinculados con el turismo, pero que, aseguró, se ajustan a los aumentos de costos que tuvieron las empresas. En Mar del Plata, una habitación doble con desayuno puede costar desde $10.000 en un hotel 2 estrellas a $50.000 en uno de 5 estrellas. Un aumento del 70% respecto a enero de 2022.

Juan Antonio Gutiérrez, presidente de la Cámara de Comercio y Servicios de Mar del Plata, fue algo más optimista y sostuvo que la demanda en hotelería y gastronomía es buena, pero reconoció que algunos rubros, como el de ropa y calzado, tradicionales en la ciudad, no están vendiendo bien.

En Bariloche, también es floja la ocupación no sólo respecto de la del año pasado sino también comparado con el promedio histórico, señala Infobae. Martín Lago, presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de esa ciudad, manifestó a ese medio que la previsión de ocupación para enero es del 69%, cuando el histórico era de 90%. Un factor favorable es el turismo extranjero. Como hay menos residentes locales viajando al exterior, hay más butacas disponibles en los aviones para los extranjeros. Mientras en 2022 hubo 90% de turistas nacionales y 10% de extranjeros, hoy esa composición es 70%-30 por ciento. Una característica de este año es la mayor afluencia de turistas extranjeros, aprovechan la brecha cambiaria. El empresario de Bariloche se mostró preocupado por el alto grado de informalidad que hay en el alojamiento. Bariloche recibe entre 1,2 y 1,5 millones de turistas al año, de los cuales la Secretaría de Turismo municipal registra apenas 700.000. El resto se estaría alojando en sitios no registrados, que le generan una competencia desleal a los que son oficiales.