Acindar despidió este miércoles al personal que trabajaba en la planta Navarro, ubicada en Av. Presidente Perón al 7.800, en la zona oeste de Rosario. La cesantía de los 150 empleados que la empresa tenía en 2016, se dio en varias etapas, y en las últimas horas los directivos se desprendieron de los últimos 10 operarios. Para la Unión Obrera Metalúrgica, se trató de una medida “arbitraria e intempestiva”.

“Cuando llegaron a sus casas, los trabajadores se encontraron con los telegramas, confirmó el abogado de la UOM, Pablo Cerra, quien recordó que la intención de vaciar la planta, ya había sido denunciada por el gremio, dos años atrás, cuando comenzaron las primeras suspensiones y los retiros.

"No hubo aviso ni absolutamente ninguna notificación previa. Veníamos luchando hace dos años para que esta planta no cierre", señaló el abogado. “La empresa Acindar acaba de despedir a todos los trabajadores de su planta Navarro intempestiva y arbitrariamente...Solicitaremos ante el MTySS la inmediata reincorporación de los compañeros injustamente despedidos, publicó en redes sociales el representante legal de la UOM.

Este jueves, el gremio iniciará las acciones correspondientes en el Ministerio de Trabajo de la provincia de Santa Fe a fin de gestionar una audiencia con la empresa para este viernes o el lunes próximo. "Mínimamente, queremos la conciliación obligatoria para negociar con los trabajadores adentro", dijo Cerra.

El ajuste en la mencionada planta había comenzado en 2016. En noviembre de ese año, Acindar eliminó uno de los dos turnos de laminado y unos 80 empleados decidieron tomar retiros voluntarios. En ese momento, la empresa fundamentó la eliminación del último turno por la baja en la demanda a cuenta del contexto económico recesivo.