La contratación de seguros contra el robo de carteras aumentó sostenidamente en los últimos años. El Banco Municipal realiza un promedio de unas 100 pólizas nuevas mensuales, la aseguradora La Segunda registra un crecimiento del 20 por ciento de la contratación mes a mes y el Banco Galicia experimentó un incremento del 53 por ciento en lo que va del 2017 respecto a igual período del año pasado.

En su mayoría, quienes sacan estos seguros son mujeres de más de 40 años. Por su parte, chicas más jóvenes y hombres se inclinan por pagar seguros que los cubran ante el robo de dispositivos tecnológicos con los que circulan a diario por las calles de la ciudad.

Bancos, aseguradoras, cadenas minoristas y otros jugadores que operan como intermediarios —como Falabella o Garbarino— cuentan con coberturas que, en promedio, arrancan en los 40 pesos y se extienden hasta los 300 pesos mensuales.

Ejecutivos de las áreas de seguros consultados sobre las coberturas para carteras, mochilas y celulares coincidieron en señalar que los mejores publicistas son los arrebatadores y punguistas.

"Estos seguros son tomados generalmente junto con otro tipo de pólizas, como los combinados familiares", señaló Gabriel Espinosa, gerente de Incendio y Riesgos Varios de La Segunda. Esta aseguradora, por ejemplo, ofrece la posibilidad de tener cobertura para carteras "en el mundo entero y no tiene franquicia".

Los montos de las coberturas varían según el producto contratado, pero las sumas aseguradas arrancan con techos de hasta 2.500 pesos y se extienden hasta los 21.650 pesos en algunas coberturas relacionadas con ofertas de "tecnología protegida", un subsegmento que poco a poco va ganando su propio espacio.

Gran demanda

"El seguro de bolso protegido es muy demandado, porque no sólo incluye la cartera o bolso, sino además sus cosméticos, maquillajes, billetera, anteojos y el costo de reposición de los documentos que haya perdido", explicó Pablo Ahumada, gerente de banca seguros del Banco Galicia, que actualmente tiene 161.649 personas que contrataron este tipo de seguro en todo el país en 2017, un 53 por ciento más que el año pasado, cuando ya había registrado un incremento del 33 por ciento respecto a 2015.

En este banco, los seguros de carteras pasaron en tres años de una participación del 1 por ciento al 12 por ciento en el total de las ventas de coberturas. A modo de ejemplo, los seguros para el hogar detentan una participación del 4 por ciento del total de seguros de la entidad financiera nacional.

"Si bien hay hombres que también contratan este seguro para sus mochilas o bolsos del gimnasio, es en las mujeres en quienes pensamos a la hora de desarrollar este producto, y estamos constantemente poniéndonos en el lugar de nuestros clientes y pensando propuestas relevantes para cada estilo de vida", señaló Ahumada.

Claudia Compiano, gerente del área de seguros del Banco Municipal, explicó que, si bien los seguros para bolsos entraron al mercado asegurador alrededor del 2010, el crecimiento cobró mayor vigor "hace tres años".

Consideró que se trata de un tipo de producto "que se fue extendiendo y masificando de la mano de otros". Incluso, detalló que "hay padres que contratan seguros para la mochilas de sus hijos".

La ejecutiva agregó que hace dos meses incorporaron "telefonía protegida" para ofertar más opciones.

Compiano señaló que los niveles de siniestralidad son bajos y destacó la velocidad en los reembolsos.

La oferta de seguros en todos los casos es por robo, no por hurtos, coincidieron en aclarar los ejecutivos consultados. Las diferencias están en los techos de indemnización y en los alcances de cobertura.

Roxana Agostini, gerente zonal de seguros del Banco Nación, coincidió en que los seguros para carteras y mochilas "tomaron mucho más vuelo en el último tiempo", fundamentalmente entre "las mujeres de más de 40 años".

Alcance y límites

La mayoría de las entidades consultadas explicaron que para acceder a estos productos de protección en la vía pública hay que ser cliente del banco o poseer la tarjeta de fidelización, como es el caso de Falabella, que opera con distintas aseguradoras.

Cada seguro tiene su particularidad sobre los montos y alcance de los objetos cubiertos, ya que hay propuestas las que, por ejemplo, las coberturas se limitan a la billetera o tarjetas de la entidad. Muchas incluyen la reposición de llaves, documentos y celulares, siempre y cuando está facturado en el país o haya sido declarado en la Aduana.

En el último tiempo se está extendiendo la protección específica para celulares, algo desarrollado también por las propias compañía de telefonía.

Fuente: La Capital