El video que grabó Ramón Ezequiel Machuca, alias Monchi Cantero, para la exjueza Alejandra Rodenas, precandidata a diputada nacional por el peronismo, sacudió la campaña política con vistas a las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (Paso) que se llevarán a cabo el domingo próximo. En las imágenes, Machuca, uno de los líderes de la banda narco Los Monos, trata de "mentirosa" a la exjueza, quien lo procesó en el marco de una causa en la que se le atribuye un amplio abanico de delitos entre los que se cuentan homicidios, extorsiones, amenazas y lesiones. Lo hace desde su lugar de detención, el penal de Coronda. Que el video, que se viralizó en las redes sociales, se haya grabado en una unidad de detención de máxima seguridad puso bajo la lupa al personal del Servicio Penitenciario de Santa Fe, a cargo de la custodia de la cárcel, puesto que los detenidos no están autorizados a tener celulares ni elementos tecnológicos como el usado por Machuca. El responsable del área de Asuntos Penitenciarios, Pablo Cococcioni, no ocultó su sopresa ante la difusión del video en el que Machuca hace una advertencia, que a todas luces es una amenaza, a la exjueza Rodenas, justo en la semana previa a las Paso, en las que la ex jueza se enfrenta al candidato K Agustín Rossi. También comentó el suceso y deslizó que el video pudo haber sido "una embarrada de cancha", y apoyó su suposición en el hecho de que "es llamativo que algunas cosas salgan en este momento preelectoral". Más allá de su lectura del hecho, no explicó cómo un recluso alojado en un sector de "máxima seguridad" puede tener acceso a dispositivos capaces de grabar y transmitir videos, como lo hizo Machuca. "Hubo una orden judicial de colocar a un interno de altísima peligrosidad en un lugar que para nosotros, y lo dije en audiencia, no reunía las condiciones de seguridad", afirmó Cococcioni, admitiendo que los recursos del área a su cargo no están en condiciones de controlar a delincuentes de alta peligrosidad como el cerebro de Los Monos.