El Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria y neutralizó el inicio del plan de lucha que había decidido la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) para apoyar su reclamo de aumento salarial del 30%. Además, convocó para el jueves a una reunión entre el gremio y las cámaras empresariales.

La conducción del sindicato que lidera Antonio Caló y los empresarios volvieron a reunirse en la sede de la UOM pero las negociaciones se trabaron nuevamente y entraron en un cuarto intermedio.

Ante este panorama, la cartera laboral dictó la conciliación obligatoria para impedir que los trabajadores metalúrgicos pongan en marcha asambleas en las fábricas a partir del martes, tal como ya habían anunciado.

La UOM exige un aumento salarial del 30%, mientras que en las últimas reuniones las empresas subieron su oferta del 18% al 20%. Esa cifra, que está en torno a la pauta que pretende el gobierno, sigue lejos de las aspiraciones del sindicato.

La medida de fuerza dispuesta —ahora en suspenso— había sido aprobada en el congreso nacional de la UOM que se realizó la semana pasada en Mar del Plata. El próximo 10 de mayo los secretarios generales de todas las filiales del sindicato se volverán a reunir para definir los pasos a seguir.

La negociación paritaria metalúrgica incluye otro ingrediente, que es el reclamo de sindicalistas y empresarios contra la apertura de importaciones y la caída de puestos de trabajo que esa medida genera.

Según los metalúrgicos, en los últimos tiempos se registró la pérdida de más 20.000 puestos laborales entre despidos y suspensiones.

"Los representantes empresarios estiraron su oferta inicial de un 18% de incremento salarial a un 20%, pero para nosotros ese porcentaje es insuficiente, porque queremos que los salarios estén por encima de la línea de pobreza, en unos 13.800 pesos", sostuvo el dirigente de la UOM Enrique Salinas.

En este contexto, el próximo jueves las partes volverán a verse, en el marco de la séptima reunión paritaria en lo que va del año para intentar acercar posiciones.

El aumento del 20% en dos cuotas que rechazan los metalúrgicos es el que el gobierno alienta para todos los gremios y, de hecho, ya firmaron paritarias por esa cifra sindicatos como Empleados de Comercio y Uocra, mientras que se espera que en breve hagan lo propio UPCN y UTA.