El chofer que conducía el interno 2267 de la empresa TurBus que volcó en Horcones y provocó la mayor tragedia vial de Mendoza fue imputado por las 19 muertes que provocó con su accionar. Quedará detenido en el penal de Boulogne Sur Mer. Su compañero, quien iba durmiendo al momento del siniestro, recuperó la libertad.

El fiscal de Homicidios, Gustavo Pirrello, imputó al chileno Francisco Sanhueza por homicidio simple con dolo eventual por las 19 muertes y por lesiones leves, graves y gravísimas dolosas que provocó a los más de 20 heridos.

Mientras continúa la instrucción de la causa, Sanhueza quedará alojado en la cárcel de Boulogne Sur Mer, precisaron fuentes judiciales.

Después de la tragedia vial, los colectiveros quedaron detenidos e incomunicados en la comisaría 11 de Luján donde el fiscal Pirrelo les tomó declaración.

En la noche del sábado, quien viajaba como acompañante quedó en libertad. Según trascendidos, Pedro Vargas iba descansando en el momento del siniestro y no estaba frente al volante.

Según confirmó el procurador de la Corte de la provincia, Alejandro Gullé, el velocímetro del colectivo quedó parado en 100 km/h en una zona donde la máxima es de 40 km/h.

En declaraciones a la prensa, Pirrello informó que el chofer chileno "no declaró por recomendación de su abogada defensora" y que "será trasladado al penal de Boulogne Sur Mer".

"Aún resta esperar resultados de las pericias mecánicas y terminar de tomar declaraciones", agregó el letrado.

El fiscal dijo que basó su imputación “por las constancias en el expediente de donde surgen pruebas que estamos ante un homicidio con dolo eventual”, entre ellos algunos derrapes y advertencias de los pasajeros de exceso de velocidad que Sanhueza no atendió.

“Yo estoy con el convencimiento de que cabe esa figura de dolo eventual”, afirmó Pirrello. Finalmente, el funcionario aclaró que “desde la parte penal se analiza la conducta de quien iba con el dominio del colectivo”, en tanto que la empresa “está ajena al accidente”.