Un nuevo testimonio ante la Justicia compromete al vicepresidente Amado Boudou. Nicolás Ciccone, el ex dueño de la imprenta que imprimió billetes para el Estado, declaró este jueves por más de cinco horas como testigo en la causa penal y dijo que mantuvo reuniones con el funcionario nacional para levantar la quiebra.

El empresario confirmó la versión que aportó el martes su yerno Guillermo Reinwick, quien mencionó dos encuentros con Boudou, en los que también participó el socio del vicepresidente José María Núñez Carmona. El tercer involucrado en la causa es Alejandro Vandenbroele, presunto testaferro.

Este jueves Ciccone admitió que mantuvo reuniones con el ex ministro de Economía por la negociaciones de la imprenta que pasó a manos de la firma The Old Fund, según publicaron medios nacionales.

El fiscal Jorge Di Lello y el juez federal Ariel Lijo analizaban la figura de Ciccone, quien por ahora se encuadra como testigo.

El vicepresidente está imputado de los supuestos delitos de "tráfico de influencias", "enriquecimiento ilícito" y "negociaciones incompatibles con la función pública". El próximo paso de peso en la causa sería la declaración del titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), Ricardo Echegaray.