El juez federal Sebastián Casanello adelantó para la semana próxima la declaración indagatoria de todos los hijos de Lázaro Báez y del propio empresario en la causa de lavado de dinero, al rechazar "in limine" (sin analizar) un pedido de postergación de las audiencias.

Así, un día después del reto que recibió de la Cámara Federal para que agilice la causa, el juez resolvió que el próximo martes se presenten a indagatoria Martín, Leandro y Melina Báez, y un día después el propio Báez, su contador Daniel Pérez Gadín y del abogado Jorge Chueco (los tres presos en la cárcel de Ezeiza). Para el jueves fueron citados Luciana Báez, la cuarta hija del empresario, y el abogado uruguayo Juan Pedro Damiani, indicaron portavoces judiciales.

El juez tomó la decisión 24 horas después de un duro fallo de la Sala II de la Cámara Federal que le ordenó avanzar sobre la ex presidenta Cristina Fernández y los funcionarios que tenían bajo su orbita la obra pública, de donde —sospechan los camaristas— surgió el enriquecimiento del dueño de Austral Construcciones.

El fiscal federal Guillermo Marijuan consideró que "es un respaldo, porque confirma el procesamiento de las personas involucradas en el proceso", aunque con "recomendaciones" al magistrado, y ratificó que está investigando en los Estados Unidos si la embajada norteamericana en Buenos Aires le comunicó a la ex presidenta sobre movimientos de dinero de Báez en ese país porque, enfatizó, "eso la pone en un papel determinante en el interés que tenía por esos fondos".

Marijuan también advirtió que la fiscalía necesita "más pruebas" para avanzar contra la ex mandataria y otros imputados por lavado de dinero y no descartó que se unifiquen las distintas investigaciones contra Fernández de Kirchner y funcionarios de su gobierno.

"Algunos dicen que tal vez se pueda plantear el tema de que hubo una asociación que cometió muchísimos ilícitos, como lavar dinero, haber hecho obras sobrevaluadas, adquirir hoteles que no son explotados en la realidad, pero que sí tienen beneficios económicos", disparó.

El adelantamiento de las indagatorias ocurre luego de que las defensas de los Báez solicitaron la postergación de las mismas. Tras el rechazo del juez a las solicitudes, la defensa de Lázaro pidió directamente la nulidad de las declaraciones por considerar que el informe de la Unidad de Información Financiera, que detectó cuentas bancarias en Suiza a nombre de los hijos de Báez, se basó en "tareas de inteligencia" y no fue corroborado por vías oficiales.

Santiago Viola, abogado de tres de los hijos de Báez, volvió a apuntar a Casanello: dijo que "está tratando de cerrar la causa" sin que el empresario "diga nada" y "evitar así" la investigación a ex funcionarios públicos. Cuando le preguntaron si Báez es un chivo expiatorio para que la causa de lavado no alcance a la ex jefa de Estado, Viola respondió: "Sí, exacto", y agregó: "Entiendo que si realmente existió un delito es inevitable que fue con la petición de funcionarios públicos como la presidente y el ministro Julio De Vido".