Los alegatos en un juicio contra cinco personas juzgadas por el secuestro de 41 kilos de marihuana en Rosario prometían novedad porque era evidente que el procedimiento policial que los detuvo, realizado por la ex Drogas Peligrosas de Rosario en el año 2012, estaba plagado de anormalidades. Pero esa circunstancia pasó a un segundo plano cuando el defensor oficial del principal acusado señaló que su cliente, Juan José Muga, había dicho que entregó a la jueza federal Laura Cosidoy un informe con los nombres de los principales policías que actuaban en el mercado de la droga. Aludía al vínculo "entre un cabo de apellido Bael y su cuñado Luis Medina". Lo hacía cuando el nombre de Medina, acribillado de 20 balazos 15 meses después, sólo sonaba en círculos restringidos.

Según el defensor Carlos Zurcher su cliente también aportó ese día en el juzgado federal de Instrucción Nº 4, los nombres de otros policías santafesinos, que vinculó al narcotráfico, y que dijo todos tenían conexión con Medina. "Floiger, Guillermo Cardini, Spoletti, Gustavo Pereyra, Maciel, Angel Avaca. Comisario Romero, comisario Romitti, estos dos últimos estaban en Inteligencia Zona Sur, y ellos fueron los principales en armarme el procedimiento. Asimismo Luis Medina tenía también estrecha vinculación con estos policías y con los dos que paso a mencionar: Franganillo y el Chino Paz". Todos estos policías tuvieron actuación en áreas de Drogas de la policía provincial y algunos de ellos esperan juicio por asociación ilícita como integrantes de la banda de Los Monos. Muga es un hombre con dos condenas por narcotráfico atenuadas por actuar como arrepentido y proporcionar datos útiles para la investigación.

 

Esto fue leído este miércoles en una audiencia donde la fiscal Adriana Saccone pidió seis años de prisión para Juan José Muga y su defensor, en durísimos términos, la absolución. "No explican como iniciaron el procedimiento, de donde sacaron la información contra el imputado, no se puede entender quién dio la información sobre el origen del caso. Los policías recuerdan todo lo que dice el acta de procedimiento y pierden la memoria cuando se les pregunta quién les dio la información para detener a mi cliente", dijo el defensor oficial.