"No cambió nada. No se puede cambiar la realidad con el discurso. Seguimos igual o peor". Así se despachó Rubén Bertini sobre cuál es la evaluación que hace sobre la seguridad en Rosario. A casi dos años del asesinato de su hijo Mariano en una violenta entradera, aseguró que "hace falta decisión política para que esto cambie". E inmediatamente agregó: "Aprendí mucho en este tiempo. Una de las causas macro es que hay una mafia y corrupción en la sociedad que trae de la mano a la delincuencia. Yo reclamo por lo que me pasó. Pero también creo que a nivel provincial y nacional debe haber un cambio de dirección política". En ese sentido, destacó que "no se hizo lo suficiente para cambiar ese rumbo. Se nota un cepo a la justicia a nivel nacional. En la Federal y Comodoro Py hubo movimientos, pero los mismos no repercutieron a nivel provincial. Se deberían tomar decisiones que tiendan a mejorar esta realidad". Ante la consulta sobre si el problema de la inseguridad se debe a la corrupción, Bertini aseguró: "En la calle la Justicia tiene culpabilidad porque no emite sanción para los delincuentes. Están todos sueltos por la famosa puerta giratoria, que entran y salen o como se llame. Hay dos elementos que pueden hacer que una persona no vuelta a delinquir, una es la consciencia propia de saber que hizo algo que está mal y la otra es la sanción que le puede imponer la sociedad". También se refirió al narcotráfico. Aseveró que "es un negocio más como muchos otros. Se dice que el 30 por ciento de la economía mundial es por asociación ilícita. Si no se controla vamos a estar cada vez peor. Hay que empezar porque la Justicia sancione a los que cometen delitos". En diálogo con LT3, aseguró que no está perdida la batalla contra al delincuencia. "El futuro depende de nosotros y no del político de turno. La libertad está siempre y cuando la sepamos usar. La seguridad está por encima de un partido político y tenemos que trabajar en conjunto. Pero si no lo hacemos entre todos no vamos a salir".