El juez de sentencia de los tribunales provinciales, Carlos Carbone, resolvió que los ocho acusados en la causa que investiga la muerte de Paula Perassi vuelvan a prisión preventiva, cuatro de ellos lo cumplirán de manera efectiva mientras otros cuatro tendrán prisión domiciliaria. Carbone resolvió prisión efectiva para Gabriel Strumia, sospechado como autor del homicidio de Paula, la esposa de éste, Roxana Michl, Mirtha Rusñisky, y Daniel Puyol. En tanto, determinó prisión domiciliaria para los policías de la UR XVII Gabriel Godoy, Aldo Gómez, María José Galtelli y a su superior de la fuerza sanlorencina Jorge Enrique Krenz, a quienes se los acusa por coautores de encubrimiento. En la puerta de Tribunales, Alberto Perassi analizó en La Ocho la decisión del juez: "No puedo decir que esté contento pero después de tanta lucha se acomodan un poco las cosas, o la Justicia entendió que nosotros no estamos en la mentira, siempre estuvimos en la verdad". "Aunque pasó mucho tiempo, la verdad va a salir a flote, sólo quiero conseguir los huesos de mi hija", sentenció. Liberados. Todos fueron procesados y detenidos el 20 de abril de 2015 por disposición del juez de Instrucción sanlorencino Juan José Tutau, a instancias de la investigación de los fiscales Eduardo Filocco y Román Moscetta, y liberados a mediados de agosto tras el fallo del camarista Adolfo Prunotto, con cauciones a cada uno de entre 30 mil y 100 mil pesos. Paula Perassi desapareció en septiembre 2011 cuando estaba embarazada de seis semanas. Según la carátula del caso, murió durante la práctica de un aborto, al que fue sometida contra su voluntad.