El levantamiento del cepo y la devaluación que anunció el gobierno la semana pasada, reactivó la puja distributiva. Distintos sectores sindicales salieron a presionar por un bono de fin de año de entre 4 y 5 mil pesos, mientras anticiparon que el "piso" de reclamo salarial para el próximo año será del 30 por ciento. Además, condicionaron el pacto social que propuso el gobierno de Mauricio Macri a las respuestas a los trabajadores después de la devaluación, que ya superó el 40 por ciento. Frente a eso, en el marco de la Cumbre del Mercosur, el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay anunció que "será lanzado un esquema de metas de inflación y la convocatoria a "un acuerdo social amplio".

Después del anuncio del levantamiento del cepo cambiario desde distintos sectores sindicales y políticos alertaron sobre el impacto de estas medidas en el poder adquisitivo del salario y cómo condicionaría la negociación paritaria de 2016. En ese marco, el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay se abocará esta semana a analizar la situación fiscal y elaborar el plan de metas de inflación para los próximos años, que será presentado por Macri a sindicalistas y empresarios en el marco de la denominada "Mesa del diálogo social", que será convocada a mediados de enero próximo.

El diputado Facundo Moyano aseguró que la inflación estará "por encima del 30 por ciento" al finalizar este año, por lo cual evaluó que el gobierno debería haber "tenido consideración" sobre este tema.

Moyano, quien es secretario general del Sindicato Unico de Trabajadores de los Peajes y Afines, consideró también que "el 2016 será un año complicado en términos de inflación y medidas que impactarán sobre el salario". Además, dijo que cada organización sindical negocia en el ámbito privado cuáles serán los pasos a seguir tras la estampida de precios de las últimas semanas.

La CTA que conduce Pablo Micheli ratificó su pedido de un bono de fin de año y adelantó que le envió una carta oficial al presidente Mauricio Macri. Aseguró que participará de la marcha convocada para este martes con el fin de reclamar el plus y advirtió que la protesta sólo se suspenderá si el gobierno "accede" al pedido.

En tanto, el secretario general del gremio bancario, Sergio Palazzo, aseguró que la administración macrista debería fijar "un piso de entre 4 y 5 mil pesos" para el bono de fin de año que reclaman los trabajadores como compensación a la escalada inflacionaria.

Advirtió que, de no existir ese bono de fin de año, en 2016 habrá una "paritaria durísima" en la que los trabajadores intentarán recuperar el poder adquisitivo perdido por la devaluación, la quita de subsidios y la suba de precios.

"Yo vislumbro una paritaria con una expectativa inflacionaria alta. Entre 36 y 40 por ciento", advirtió el jefe de la Bancaria, aunque aclaró que aún no está definido cuál será el aumento salarial que reclamará el sector en las paritarias 2016.

El secretario general de la Uocra, Gerardo Martínez, anticipó que la base del reclamo salarial para las negociaciones paritarias 2016 del sector "será del 30 por ciento, que es lo firmado el año pasado".

"El gobierno tiene toda la facultad para resolver la cuestión macroeconómica, pero tiene que garantizar el cuidado del poder adquisitivo de los salarios", dijo. Así, insistió: "Vamos a estar defendiendo palmo a palmo el salario real y el nivel de empleo. La base es la que firmamos el año pasado, que es el 30 por ciento. Analizaremos en ese sentido y en el momento el impacto que se ha generado y cómo repercutió en el salario".