Ocho empresas presentaron sus ofertas para competir por la licitación del sistema de videovigilancia para el transporte público de pasajeros. El objetivo es que a partir de junio de 2016 unos 150 colectivos del transporte urbano de pasajeros, que funcionan durante el servicio nocturno, estén vigilados con un sistema de cámaras conectados al 911 y al Centro de Monitoreo del municipio.

La explotación del sistema que tendrá cuatro aparatos por coche con un registro que almacenará imágenes será por un plazo de 24 meses, mediante una inversión pública de 20 millones de pesos.

El viernes pasado, el Ente de la Movilidad recepcionó los pliegos de las ocho firmas interesadas en adjudicarse la provisión de las 600 cámaras de videovigilancia que estarán instaladas en 150 colectivos del servicio nocturno del transporte urbano de pasajeros.

El llamado contempla la instalación y puesta en funcionamiento de un micrófono ambiente, botón de pánico y cuatro cámaras de video vigilancia por cada coche, así como el servicio de mantenimiento integral del sistema.

El proyecto tiene un presupuesto oficial de 20 millones de pesos, y fue desarrollado de manera conjunta entre el Ente de la Movilidad de Rosario y el aporte del gobierno provincial.

Las empresas oferentes que se presentaron fueron: Xiden, Plettac Electronics Argentina, ADT Security Service, Conexys, Global View, Telecom Argentina, Quality Systems Group y Crayon Web.

Plazos. A partir de hoy el municipio abre el plazo de impugnaciones entre las 8 empresas presentadas, mientras una comisión evaluadora analizará la documentación de base. De no mediar dilaciones y sorpresas se pasará a la apertura del sobre con las ofertas técnicas, para luego pasar al sobre con las propuestas económicas.

“Estimamos que todo este proceso debería estar concluido antes de fin de año, y luego proceder a la firma del correspondiente de contrato”, estimó la gerenta del Ente de la Movilidad local, Mónica Alvarado.

Según explicó la funcionaria la primer entrega de la cámaras y equipamiento informático y conectividad debería concretarse en 60 días para las primeras 50 unidades.

Luego, y según el contrato, deberían realizarse dos entregas subsiguientes durante seis meses hasta completar las 150 unidades de las tres empresas concesionarias (La Mixta, Semtur y Rosario Bus).

La contratación del servicio será por 24 meses y para una parte de la flota local compuesta por unos 700 colectivos.

¿Cómo funcionará el sistema de videovigilancia? A bordo de cada coches, todos los componentes (videocámaras, micrófonos y botones de pánico) estarán integrados físicamente y  conectados a una unidad móvil de grabación ubicada dentro de un gabinete especial en el interior de las unidades, sin acceso directo de personas ajenas al servicio.

Cada una funcionará en forma autónoma, registrando las imágenes captadas dentro de cada habitáculo y conectada a un servidor central.

Pero a su vez, se montarán siete terminales de acceso a la información. Dos de ellas estarán en la central policial 911, otras dos en el Centro de Monitoreo de la Movilidad y una por cada empresa de transporte urbano de pasajeros. Lo que permitirá esta licitación es conocer en tiempo real el estado de los dispositivos existentes dentro del vehículo, operar en forma remota las cámaras, como así también monitorear su funcionamiento.

“Esta medida tiene como objetivo aportar a la seguridad pública a partir de la detección y asistencia en situaciones de emergencia. Y esta licitación además forma parte de un proyecto integral entre la Municipalidad y el gobierno santafesino”, resaltó Alvarado.

La puesta en marcha de la licitación se anunció varias veces a lo largo del año. El primer lanzamiento fue a mediados de marzo y surgió como respuesta oficial tras el ataque a balazos contra un colectivero de la línea 146. El hecho de violencia había provocado un paro en 18 líneas de Rosario Bus durante 24 horas. Hacia fines de julio, el Ente de la Movilidad había prometido que antes de fin de año se iban a montar las primeras 150 cámaras. Ahora, y con las propuestas en danza, el proceso parece encaminarse hacia su resolución final.