El más veterano de los jueces de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Fayt, afrmó que planea seguir en su cargo “mientras Dios” le de vida, y se sumó de esta manera al debate sobre si está o no en condiciones físicas y mentales, a sus 97 años, para permanecer en el máximo tribunal judicial de la Nación.

“Soy consciente de todas las manifestaciones de aprecio que he recibido en estos días a través de la prensa, la radio, la televisión, Internet. Los comentarios de todos. Tengo información a través de los medios. Me encuentro bien, estoy trabajando como siempre y seguiré así mientras Dios me de vida”, dijo.

Fayt se introdujo de esta manera en el debate a través de tres mensajes breves y por momentos inaudibles, que fueron a grabar ayer a su casa dos periodistas que forman parte del equipo del programa “Gente de Derecho” (Radio América), que conduce su abogado y dirigente de la agrupación homónima, Jorge Rizzo.

En otro pasaje de los audios emitidos por radio, el funcionario judicial más anciano del país admitió: “Todavía tengo poco de garganta, pero tengo buena voz, pero no es la misma cuando estoy sano que cuando estoy enfermo”.

Los otro dos cortes de audio presentados por el programa de su abogado no fueron referidos al debate sobre la edad de los jueces del máximo tribunal, sino que fueron referidos a los miembros del programa de radio que se acercaron hasta su casa y al propio Rizzo.

En uno de ellos, por ejemplo, sostuvo que quienes lo entrevistaron deberían tener un programa de televisión: “El abogado tiene que tener una voz que diga qué es lo que corresponde a la abogacía, eso hace falta, es muy importante que lo tenga”.

El desempeño de la Corte Suprema de Justicia y el rol de Fayt volvió a ser puesto en debate durante los últimos días luego de que el diario Página/12 informó que el longevo magistrado no había asistido a la reunión en la que se acordó la reelección de las autoridades del máximo tribunal.

El problema fue que los ministros de la Corte emitieron un documento en el que señalaron que los cuatro miembros participaron de la reunión, celebrada en el salón de Acuerdos de tribunales, y que allí decidieron reelegir a Ricardo Lorenzetti como presidente y a Elena Highton de Nolasco como vice; algo que en los hechos no ocurrió.

Del encuentro en el que se decidió la reelección anticipada de Lorenzetti, por cuarto período, participaron Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda; pero Fayt no pudo asistir por cuestiones de salud: dos colaboradores le llevaron el documento a su casa para que firmara al pie.

A sus 97 años, y con dificultades evidentes para trasladarse al edificio en el que se encuentra la Corte Suprema, Fayt continúa en su cargo debido a una acordada de sus pares que logró en 1999, cuando cumplió la edad de jubilarse.

Los miembros de la Corte Suprema tiene como edad límite para jubilarse los 75 años, algo que está establecido en el artículo 99 de la constitución nacional.

La crisis institucional en la que se encuentra sumergida la Corte Suprema de Justicia excede a la edad de Fayt: por ley debería funcionar con cinco miembros, ahora está compuesta por 4 y solo 3 de ellos en condiciones de reunirse.

La vacante se produjo luego de que Raúl Eugenio Zaffaroni presentara su renuncia a partir del 31 de diciembre, tras cumplir los 75 años.

Antes el máximo tribunal había sufrido otras dos bajas: en mayo del año pasado falleció Carmen Argibay y en octubre Enqrique Petracchi, por lo que el máximo tribunal pasó de tener siete miembros a manejarse sólo con cuatro.