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20:10:19 11/02/2015

La pesadilla de una mujer que fue dada por muerta 17 años atrás y está "bien viva"

Una mujer, que fue dada por muerta 17 años atrás y sigue viva, confesó que la equivocación cometida en el acta de defunción le ha causado una seguidilla de problemas que, como el Registro Nacional de las Personas y el Ansés no han rectificado el error, le han hecho padecer una pesadilla que parece no tener fin.

Con el acta de defunción en mano, Stella Maris Rodríguez no puede salir de su asombro ante la situación surrealista que le toca vivir. “Miren, acá dice que estoy muerta. En el acta de defunción figura mi nombre y mi número de documento. Pero yo estoy bien viva”, comentó al portal de noticias SL24.

El error data del 12 de marzo de 1998. Ese día se redactó el acta de defunción que legaliza la “muerte” de la mujer, en el tomo I, acta 7 del año 1998 del Registro Civil de la ciudad de Puerto General San Martín. Desde ese momento, tuvo todo tipo de problemas, entre ellos no pudo votar. En cada elección dejó constancia de que no podía sufragar porque “no figuraba en los padrones”.

“Los primeros años el problema que tenía es que no podía votar y no sabía por qué no estaba en los padrones, pero en el año 2003 quise inscribirme en la Afip como monotributista y ahí me dijeron que no podía hacerlo porque figuraba como fallecida”, relató Rodríguez. “A partir de allí hice innumerable cantidad de trámites tanto en AFIP como en Ansés y el Registro Nacional de las Personas; pero todavía sigo con este problema”, agregó.

El Registro Civil de San Lorenzo y una posterior resolución judicial rectificaron el error. Ambos trámites admitieron el error y volvieron a declarar jurídicamente “viva” a la mujer. Sin embargo, el calvario de Rodríguez no terminó ahí, porque a nivel nacional aún no subsanaron el error, por lo tanto, sigue "muerta".

“Todavía no he logrado que el Registro Nacional de las  Personas y la Ansés me reconozcan como viva y por eso estoy trabada en un montón de cosas: no puedo votar, no puedo sacar créditos, no puedo salir del país, no puede cobrar o jubilarme, no puedo trabajar”, explicó Rodríguez.

“Es muchísimo el daño que me han hecho en este tiempo”, se quejó la mujer, quien espera que sus reclamos sean escuchados y que el tiempo de su muerte termine de una buena vez por todas.