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09:28:01 08/02/2015

Avanza el proyecto de la nueva ley de inteligencia pese al boicot opositor

El próximo jueves 12 llegará al recinto del Senado el debate por la creación de la nueva Agencia Federal de Inteligencia (AFI). Aunque con la sonora ausencia de buena parte de la oposición, el oficialismo contará con el respaldo necesario para poner en marcha la sesión, y luego obtener la media sanción de la ley que modificará sustancialmente a la vigente, sancionada en noviembre de 2001.

   El itinerario de la iniciativa oficialista se inició con un anuncio de la presidencia por cadena nacional el pasado 26 de enero y terminará con la sanción definitiva en Diputados, se prevé, en los últimos días de febrero. Aunque la puesta en vigencia, está escrito en el dictamen, ocurrirá a los 90 días de sancionada. Un plazo muy corto que supone gran destreza en la tarea de reglamentación e implementación.

   Casi todo el conglomerado opositor, como ya sucedió en otros momentos de la etapa kirchnerista, decidió aplicar su último recurso, extremo: no participa en el debate en comisiones y anuncia —por ahora con la excepción bloque de Adolfo Rodríguez Sáa— que no irá al recinto el próximo jueves. En esa línea, busca crear una agenda de actividades propia que dispute la atención mediática a la sesión del Congreso: hará una audiencia pública informal, en el mismo Senado, con el gaseoso objetivo de esclarecer el caso (Alberto) Nisman, una actividad del Poder Judicial.

   Marcelo Fuentes, senador, presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales que presidió los plenarios de debate sobre la nueva ley de inteligencia interpretó ante La Capital la ausencia opositora: “Hay una campaña de actores corporativos mediáticos que no quieren que en la Argentina haya partidos políticos ni instituciones, y hay dirigentes políticos que le hacen de comparsa. Por más que ahora armen un circo, tarde o temprano la oposición se tendrá que sentar a discutir política”, fustigó.   Flexibilidad. A la ya clásica crítica opositora en el sentido de un Congreso “escribanía”, dónde no se modifican los proyectos de ley que llegan de la Casa Rosada, el FpV mostró flexibilidad aceptando algunos cambios que propuso el prestigioso Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels), y avisó que podrían hacerse nuevos cambios, hasta el momento de la votación. Pero la oposición ya decidió ir por otro camino; el gesto oficialista no le resulta suficiente a los opositores para sentarse a disputar un partido que ya tiene el resultado puesto desde antes.

   Claro que la incomodidad por la ausencia opositora es compartida. Y no son pocos en la oposición que se preguntan cuánto suma y cuánto resta tomar esa actitud extrema.

   “El problema es que el oficialismo arremete con las iniciativas, nosotros necesitamos otro tipo de tratamiento, una búsqueda de acuerdos con la oposición, más tiempo para el debate, y al menos un gesto: derogar el convenio con Irán”, explicó a La Capital el jefe del bloque del PS en Diputados, Juan Carlos Zabalza.

   En los hechos, el rosarino anunció que en Diputados (la próxima semana) la oposición continuará desertando del debate. Luego Zabalza reconoció que se trata de una situación “no deseada, un lugar dónde no quisiéramos estar”.

   Por su parte, el Ministro de Defensa Agustín Rossi, pidió prudencia y austeridad de palabras a todos los dirigentes políticos, atentos al momento delicado que se configuró luego de la muerte de Nisman.   “Necesitamos clarificar cada tema por su andarivel, la denuncia de Nisman, y la muerte, la nueva ley de Inteligencia. La tendencia a mezclar todo no aporta nada”, explicó Rossi ayer a este diario.

   Respecto de la ausencia opositora en el debate parlamentario Rossi comentó: “Conocemos esa actitud, lo extraño es que la repitan. Todas la veces que desertaron de los debates la sociedad se los reprochó”.

   Las sesiones extraordinarias de febrero siguen corriendo, mientras la oposición desafía abiertamente el cronograma. La pregunta es si cuenta o no con margen político para continuar fuera del recinto.