Un muerto y un detenido fue el saldo de una persecución cinematográfica que protagonizaron en horas de la tarde de este sábado un patrullero de la policía y una camioneta de alta gama que concluyó con una recio tiroteo en el corazón de barrio Larrea, en la zona sudoeste de la ciudad.

Alrededor de las 15 del sábado una 4 X 4 Hilux bloqueó el paso de una moto de alta cilindrada en la intersección de Felipe Moré y Godoy, en cercanías del Centro de Distrito Oeste. Uno de los ocupantes de la camioneta se bajó con la intención de llevarse los bolsos que cargaba el motociclista.

Justo en ese momento arribó al lugar un móvil del Comando Radioeléctrico que, al advertir lo que estaba sucediendo, encendió la sirena y se detuvo para a permitir que uno de los agentes se baje y le de la voz de alto a los delincuentes que, sorprendidos in fraganti, se dieron a la fuga.

La patrulla policial inició la persecución de los asaltantes por 27 de Febrero, uno de los cuales, en el apuro por escapar y como no pudo entrar al vehículo, iba encaramado en el estribo, en uno de los laterales de la camioneta. En la veloz carrera se produjo un intercambio de disparos.

Al llegar a la esquina de Juan B. Justo y México, la 4 X 4 hizo una maniobra temeraria para perder a los policías y volcó. Los policías aprovecharon para detener a uno de los delincuentes y comprobaron que en el interior del vehículo siniestrado había un cadáver ensangrentado y que el otro ladrón había logrado escapar.

El apresado, un menor, fue hallado escondido en el patio de una casilla precaria ubicada a pocos metros del lugar donde volcó la camioneta. 

Actúa por razones de jurisdicción la seccional 20ª y la fiscalía en turno, a cargo de Ademar Bianchini.