Carta Abierta ratificó su rechazo a la candidatura presidencial de Daniel Scioli. "El sucesor de Cristina tiene que ser una persona identificada con las grandes líneas del proceso político que se inició en 2003", sostuvo Eduardo Jozami, integrante del espacio de intelectuales kirchneristas, en diálogo con La Once Diez/Radio de la Ciudad.

"Ese es el camino que ha señalado Carta Abierta", enfatizó Jozami. Esta postura ya había sido difundida en un documento realizado el mes pasado , titulado "Encrucijadas del futuro".

En ese escrito, el grupo de pensadores dirigido por el titular de la Biblioteca Nacional, Horacio González, hizo una férrea defensa de la administración de Cristina Kirchner y cuestionó al líder del Frente Renovador (FR), Sergio Massa, y a la propuesta del Frente Amplio-UNEN (FAU).

"Carta Abierta no elige candidatos, aunque no renuncia a apoyar en su oportunidad a quien se identifique más con el programa popular, pero tiene la obligación de decir que el postulante hoy mejor instalado en las encuestas está lejos de cumplir esa condición", decía el documento. Si bien no mencionaba a Scioli, hacía claras referencias al mandatario bonaerense.

"Las simpatías de algunos gobernadores y dirigentes del PJ por una candidatura moderada son las dos pinzas que dificultan una acción más decidida del Gobierno en la perspectiva del 2015", decía la Carta Abierta, y agregaba: "Sería poco serio, casi podría considerarse una humorada, levantar esta propuesta emancipadora y ponerla en manos de un candidato que no comparta en lo esencial el rumbo seguido por Néstor y Cristina".

Además, criticaban la política de seguridad de Scioli, que había convocado a efectivos pasados a retiro para reforzar la policía. "Tampoco contribuyen ni a la tranquilidad social ni a la eficacia de la prevención quienes convocan a la guerra contra el delito, con un tono épico digno de mejor causa, y promueven drásticas ampliaciones de la fuerza policial que permitirían el retorno a filas de aquellos que fueron separados por actos de corrupción y vejación a los ciudadanos", decía el documento.

Fuente: La Nación