Los propietarios del Hotel Ariston, uno de los emblemáticos emprendimientos turísticos que lleva más 34 años de historia en Rosario, se presentaron en convocatoria de acreedores. La jueza en lo Civil y Comercial de Rosario, Susana Geiler, podría aceptar el pedido de concurso preventivo.

Según trascendió, la firma acumularía una importante deuda fiscal y los índices de ocupación de los últimos años han sido bajos. Esos problemas financieros hicieron además que una obra de ampliación iniciada hace un tiempo quedaran paralizadas.

Carlos Mellano, titular de la Asociación Hotelera y Gastronómica de Rosario, dijo que el caso del hotel Ariston no es un episodio aislado, y reconoció "que hay preocupación" en el sector turístico  "desde mucho antes de la devaluación del peso en el verano y por la inflación, que fueron en detrimento de la actividad o rentabilidad de los negocios."

"Lo que analizamos como asociación es la desigualdad que hay entre el incremento de la oferta que hay tanto en la actividad hotelera como gastronómica con respecto a la demanda. En ese punto de desequilibrio se da el problema estructural que tiene la hotelería. Eso es lo que percibe en las reuniones con los afiliados", agregó Mellano.

Mellano admitió que hay un "parate" en los proyectos hoteleros que estaban en construcción.

"Este parate va de la mano de las reglas no claras que manejan los inversores en base a las variables económicas. Los desarrolladores tienen ese mecanismo de ver cómo está la actividad económica. Por esos motivos, en virtud de situaciones puntuales, se analiza parar la obra. A veces, son más rentables actitudes especulativas o cuestiones que tienen que ver con diversificar las inversiones", agregó.  "Esto pasa en la obra pública, que cuando el Estado no tiene dinero la para, y en la obra privada", añadió.  

Fuente: La Capital